El próximo día 12 de mayo, a las 10 horas, Adán Israel Aguilar, sumiller profesional, formador y vicepresidente de la Asociación de Sumilleres de Castilla-La Mancha, impartirá la ponencia: El servicio en el restaurante. Topsala, en la Sala de Catas Custodio Zamarra del Pabellón Ferial de Ciudad Real, una actividad enmarcada en la praxis del vino de FENAVIN –del 12 al 14 de mayo-, organizada por la Asociación de Sumilleres de CLM y Amigos del Vino.
El buen servicio es la base que garantiza degustar adecuadamente un vino. Factores como la conservación y la temperatura son vitales para proporcionar un recuerdo agradable y potenciar la imagen positiva de un vino. He aquí la importancia que juegan los camareros, jefes de sala y sumilleres en su degustación. Un papel a veces denostado, que motivado por la crisis, ha propiciado una criba en el sector y ha generado una nueva hornada de hosteleros notablemente formados y profesionalizados. Por esta razón, Israel afirma que «vivimos un momento dorado en el que debemos reclamar la posición, el prestigio social y mediático del camarero, maestresala, coctelero y sumiller. Este colectivo es parte fundamental en el servicio y la venta del vino.»
Una apuesta por la profesionalización: Topsala
Con el objetivo de reivindicar y mejorar la cualificación de este sector, se ha unido el «savoir-faire» de importantes profesionales, entre ellos: Alejandro Rodríguez –jefe de sala de la Terraza del Casino de Madrid-, el reconocido maestro Mariano Castellanos, Abel Valverde -sumiller del Restaurante Sant Celoni-, junto a Adán Israel, -también sumiller del Restaurante El Granero de Quintanar de la Orden-. Todos ellos han apostado por la creación del hastag #Topsala. Un término derivado de un juego de palabras que bautiza sus perfiles en twitter y Facebook. Dos canales online que les permiten difundir novedades y tendencias, así como crear sinergias entre profesionales nacionales e internacionales.
FENAVIN, la mejor Feria de España y Europa
Como buen manchego, Adán Israel destaca la repercusión de FENAVIN a nivel económico, social, turístico y gastronómico en Ciudad Real y provincia, y también su contribución a posicionar La Mancha en el mapa global. Por su profesión ha sido testigo de la evolución de la Feria Nacional del Vino desde su fundación en el año 1999. En su opinión: «es un proyecto intocable que demuestra el buen saber hacer de la organización durante estos años en su crecimiento y proyección internacional, que le hace merecedora de ser la mejor feria del vino en España y en Europa junto a Prowein».