El pasado 17 de febrero la nieve visitó el cuadrante suroeste de la provincia de Ciudad Real, incluyendo la ciudad de Puertollano, Almadén o Brazatortas como podeis ver en el reportaje que hicimos con fotografías de estas localidades. Como la nieve se vende cara en la provincia, había que aprovechar su visita y encima en un entorno tan bonito como el Valle de Alcudia y Sierra Madrona. Junto con otro “meteoloco” fuimos a la “caza” de la nieve a estas zonas. Cuando llegamos el espesor ya había menguado con respecto a la mañana pero pudimos disfrutar de ella. ¡Y aquí el resultado!
Sierra Madrona es un enclave montañoso que se enmarca dentro de Sierra Morena, al sur de la provincia de Ciudad Real. Aquí se encuentran algunos de los picos más altos de Sierra Morena, como el Bañuela (1.333m), Dormideros (1.328m) y Abulagoso (1.301m). La propia ciudad de Puertollano ya se encuentra en las estribaciones de Sierra Morena y a partir de Brazatortas ya la carretera empieza a subir de altitud. Al pasar la primera sierra de Brazatortas, donde ya había nieve, se empezaba a ver la verdadera Sierra Madrona con las montañas vestidas de blanco:
Subiendo por la N-420 alcanzamos el puerto de Niefla, a algo más de 900 m y situado muy cerca del pico Abugaloso. En este puerto sí que nos encontramos con nieve más continua y más espesor (es el punto donde más vimos):
Desde ahí arriba las vistas al Valle de Alcudia eran…espectaculares!:
El valle de Alcudia es una depresión de 1200 km² extendida de Oeste a Este de la parte sur de la provincia de Ciudad Real, sobre más de 100 km de longitud, con una enorme riqueza ecológica y paisajística perfectamente preservada. Su nombre viene del río Alcudia, que lo cruza a lo largo de 75 kilómetros y comprende muchos municipios como Fuencaliente, Cabezarados, Cabezarrubias del Puerto, Solana del Pino, Almadén o Mestanza entre otros. Ya hemos visto como se veía su nieve desde arriba…y así era abajo:
Siguiendo por la misma carretera, un poco más arriba nos encontramos con el puerto de Valderrepisa, también con nieve:
De nuevo bajamos y, tras dar la vuelta en Fuencaliente, nos encaminamos al último punto de nuestra ruta: la casi abandonada localidad de Minas del Horcajo. Por el camino nos encontramos con un valle donde el agua corría a través de ríos y arroyos con fuerza. Estaba todo totalmente encharcado y rezumando agua por todas partes:
En el camino a Minas del Horcajo, muchos de estos arroyos cruzaban el camino que conduce a la pedanía:
Y nuestra última etapa es en Minas del Horcajo. En la actualidad tan sólo hay 2 habitantes censados (aunque viven unos 9) pero en su época de esplendor, a finales del siglo XIX, llegó a superar las 2.000 personas. Podéis ver cómo era antes en este enlace y en este.
Hoy pertenece a Almodóvar del Campo y las sierras que le rodean superan los 1.000 m y las lluvias anuales alcanzan los 830 mm. Las explotaciones mineras eran las que daban vida a esta localidad que llegó a contar con un hospital, escuelas y farmacias, pero al empobrecerse el filón poco a poco las extracciones se fueron abandonando y se paralizaron en el año 1911. Aunque en los años 50 se hizo un intento por reanudarlas, finalmente en 1963 se dieron por cerradas las minas y la mayor parte de la población ya se había marchado a otras localidades como Puertollano. Este es el túnel que da acceso a la localidad:
Los pocos restos que quedan en pie de pueblo (a la derecha, la iglesia de San Juan):
Los restos de las minas:
Las vistas al valle son espectaculares, con una paz que sólo la rompe el paso del AVE a cada rato:
Y aquí viene la parte misteriosa “sobrenatural”. Fijaros en la fotografía que hicimos al túnel por el lado del pueblo:
Al pasar las fotografías al ordenador y también compartirlas en un grupo de whatsapp, muchos parecieron percibir la presencia de cosas…misteriosas. En el círculo rojo de abajo, a la entrada del túnel, un amigo nuestro se percató de lo que parece ser la figura de un gato (¿?). Esta es la imagen ampliada (os recuerdo que pinchando en la imagen la podéis ver en grande):
En cuanto al círculo rojo de arriba, muchos ven claramente como a una persona agazapada tras el árbol. Así sería esta imagen ampliada:
Finalmente, en otra parte de la foto también algunos creen que hay una presencia. Imagen ampliada (esta presencia estaría en la parte derecha:
En fin, el estudio de esto se lo dejaremos a Iker Jiménez.
Fenómenos paranormales aparte, disfrutamos mucho de esta excursión y, aparte de ver estos paisajes nevados, es muy recomendable visitarlos también en otras épocas como por ejemplo la primavera. ¡Hasta la próxima!
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Pedro Martín-Romo Navarrete
meteolamancha@gmail.com
Con viento fresco
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Pasarme de esas sustancias que fumáis, quiero viajar y ver ánimas.