El Teatro Ayala recibía en la mañana del domingo a estos divertidos personajes capaces de representar un circo con el empleo de unos simples títeres y mucha imaginación.
Magia, ilusión y muchas sonrisas inundaron el Teatro Ayala en la mañana del domingo para recibir a «Giuseppe y Peppina», dos antiguos trabajadores del circo de los hermanos Fratelli obligados a abandonar su país tras el estallido de la guerra. Pese haber sufrido las consecuencias de un conflicto tan cruel, los personajes interpretados por Alba Vergne y Alessandro Terranova no pierden el optimismo y deciden viajar a España para hacer a todos los niños participes de la alegría y riqueza de trabajar en un circo. A través de una escenografía sencilla y el empleo de unos simples títeres los actores fueron capaces de meterse en el bolsillo al conjunto de niños reunidos para la ocasión.
El montaje infantil dirigido por Pablo Vergne, dentro de la compañía El Retablo, nos dejó números tan cómicos como el de Reginna la equilibrista o el faquir Nifu Nifa, pasando por otros más emotivos como la historia de amor de Raimundo y Macanuda la mujer barbuda. El propio público se impregnó de la genialidad y alegría de un reparto que encandiló a grandes y pequeños durante más de 45 minutos.
