Multimedia.- Superhéroes, huevos kinder, símbolos de whatsapp, canarios en su jaula y hasta Caperucita Roja con su correspondiente lobo han corrido esta mañana en la tradicional y divertida San Silvestre de Torralba de Calatrava, que se ha convertido en una carrera de récord, con 417 participantes disfrazados, llegados desde distintos rincones de la provincia, en un ambiente divertido con un punto de competición que terminó con unas migas y unas gachas para devolver las fuerzas perdidas a los corredores.
Organizada por atletas veteranos de la localidad, con la colaboración del Ayuntamiento torralbeño, en la carrera han sido los más pequeños quienes han tomado antes la salida, con muchos más disfraces que el pasado año: pequeñas hadas, mosqueteros, spiderman o pastorcillos lo han dado todo en su recorrido de 450 y 900 metros, dos distancias entre las que podían elegir si tenían fuerzas para completar la distancia grande.
Antes la prueba, Ángel Senén, representante de los atletas torralbeños que han organizado la prueba, ha entregado un cheque simbólico con los 441 euros recaudados entre todos los participantes que han decidido no correr, pero sí hacer llegar la cuota de inscripción para una causa solidaria, en este caso, para la Asociación contra el Cáncer de Torralba de Calatrava. Su presidente, Lorenzo Nieva, recogió el cheque de manos de la alcaldesa, Teresa González y del propio Senén.
Eufemio Velasco, el concejal de Deportes, disfrazado de conejo para la ocasión, se mostró muy satisfecho por la altísima participación y el clima divertido y distendido en el que se desarrolló la prueba. “Nunca deja de sorprenderme la capacidad que tienen los torralbeños para hacer de cualquier acto algo muy especial, en este caso, una auténtica fiesta deportiva”, ha asegurado.
Los atletas seniors recorrieron 4,4 kilómetros en un circuito marcado con salida y meta en la plaza de la Villa (la del Ayuntamiento), con una primera vuelta controlada a un recorrido urbano y una segunda vuelta más competitiva, en la que los corredores que entrenan cada día han podido demostrar su estado de forma.
Aunque no había premios, sino regalos, al final, la prueba senior la ha ganado el corredor Alberto Ruiz, de Bolaños de Calatrava que, junto al resto de corredores, se han dirigido directos a por las migas y las gachas preparadas por la organización, así como a beber del barril de cerveza donado por los bares del centro de la localidad, como primera consumición de un mediodía al sol.