Feliz Navidad y felices fiestas, desde Elcogas

José A. Alcaide Martín. Trabajador de Elcogas, representante de los trabajadores, pero ante todo un trabajador más de Puertollano.- A estas alturas del conflicto, mucho se ha escrito sobre la lucha y la defensa de Elcogas. Tenemos en nuestras mentes, la idea de que el 2014 ha sido un año nefasto y complicado; pero en realidad, para los trabajadores y trabajadoras de esta central este no ha sido el único. Antes ya hemos pasado por esto y hemos vivido situaciones parecidas, muchas veces.

Si, reconozco que como esta ninguna, pero hemos visto tan cerca el drama del cierre y en tantas ocasiones nos ha pasado rozando, que sin recuperarnos de un susto, nos llegaba el siguiente. En el 2010 este drama también nos visitó. Al final se soluciono en el último suspiro y sin que apenas nadie se percatase ni se diese cuenta de lo que estuvo a punto de suceder. Pero eran otros tiempos, otros gobiernos, otros talantes y otra forma de pensar.

Recuerdo varias reuniones con el Secretario de Estado, Pedo Marín y muchas otras con directores generales de industria y energía. Otra vez, los sindicatos jugaron un papel fundamental para que Elcogas entrase en el actual R.D. de Garantía de Suministro, que lamentablemente para todos finaliza el 31 de diciembre. Siempre igual. Un gobierno tras otro, han ido escurriendo el bulto y solucionando la papeleta a base de parches en lugar de regular adecuadamente nuestra tecnología. Única en Europa y reconocida por todo el mundo.

Los que día a día, trabajamos en Elcogas, lo sabemos. Afrontar situaciones críticas y salir adelante, siempre ha sido nuestra impronta y forma parte de nuestra personalidad. A lo largo de los últimos 20 años ¿Cuantas veces nos han cerrado? Averías, rotura de un trasformador, problemas en la planta que hemos podido solucionar, gracias al apoyo de los socios, al trabajo y al esfuerzo de todos. Y cuando digo de todos, también me refiero a los trabajadores de las empresas auxiliares. Muchos nos hemos dejado literalmente la piel en ello. Cuántas penas y cuántos sinsabores hemos pasado juntos.

Elcogas ha sido pionera en muchas cosas. En tecnología, en la investigación y el desarrollo de nuevos proyectos, en innovación. De ahí lo de I+D+I que mucha gente no entiende. Pero también hemos sido un referente en relaciones laborares, igualdad, conciliación de la vida laboral y familiar, etc. Se podría decir que siempre han basado su política en priorizar la seguridad, el respeto por el medio ambiente y también el respeto hacia la personas, antes que en los beneficios y la producción.

El comité de empresa de Elcogas, compuesto por 9 miembros, 5 de UGT y 4 de CCOO, destaca por su unidad de acción, pero sobre todo por su compañerismo. Aquí todos trabajamos juntos. Laboratorio, operación de la central, jefes de turno, operarios de planta, administrativos, técnico de seguridad y gestión ambiental y supervisor de Sistemas de Control. No somos liberados y compartimos nuestras tareas habituales en la central, con el trabajo del delegado sindical, dentro y fuera de las instalaciones. Un trabajo lleno de sinsabores cuando no se consiguen los resultados esperados, pero gratificante a su vez, cuando sabes que has hecho todo lo posible por defender a compañeros y trabajadores de otras empresas que se encuentran en dificultades.

Aunque se nos critica, hemos estado en casi todos los conflictos laborales de Puertollano y provincia, de los últimos 15 años. Repsol, Encasur, Vestas, Silicio Solar, Solaria, etc. También hemos participado en manifestaciones de todo tipo y no solo aquí.  Marcha de los mineros en Madrid, conflictos en Endesa. También en manifestaciones sociales de todo tipo, aquí y en Ciudad Real. Pero no es cuestión de mencionarlo todo, solo quería decirlo para reflejar la injusta la fama que se nos da.

Para mí, nunca ha existido un interés personal y nunca he buscado un agradecimiento por ello. El problema es que debido a mi espíritu de lucha, nunca me rindo y nunca me ha gustado tirar la toalla. Tengo que reconocer, que asumir la derrota es algo que me supera, que me cuesta mucho admitir y sobre todo que me deja huella. El sindicalismo y la lucha obrera producen cicatrices que poco a poco nos van desgastando.

En mi caso particular, el ejemplo mas reciente fue el conflicto vivido hace unos años en Silicio Solar y en el que me impliqué de forma muy directa. Nadie me obligó, sabia donde me metía. Pero algo me decía que lo tenía que hacer y estaba dispuesto a intentarlo. Se dieron situaciones muy difíciles. Al final, pese a todos los esfuerzos, no pudo ser. El cierre de esta empresa y el drama social vivido por tantas familias y amigos, me han marcado de por vida, pero también me han demostrado algo que no olvidare y que me ha servido para afrontar el reto de hoy en Elcogas.

En la lucha y en la consecución de los objetivos, la verdadera fuerza se encuentra en la unión de todos los trabajadores y trabajadoras. Esto es ni más ni menos el alma y el sentir del sindicalismo de clase. En Puertollano, en Elcogas. Como anteriormente ya se ha vivido en otras empresas, nos ha tocado sufrir el efecto de la crisis energética e industrial del país. Mucho se podría escribir de todo esto, pero se lo dejo a otros.

A nosotros, a los de Elcogas, solo nos queda seguir adelante. Levantar la cabeza, apretar los dientes y luchar. No perder la esperanza ni el rumbo y seguir peleando por la defensa de nuestra empresa, de nuestras familias y de nuestros puestos de trabajo, de TODOS LOS PUESTOS DE TRABAJO. Y si para ello la familia y los seres queridos tienen que sufrir nuestra ausencia estos días de navidad, pues así será. En mi caso particular, ellos me conocen. Saben como soy y lo entienden. Lo siento por mis hermanos, sobre todo a los que no veo desde hace casi un año, pero más lo siento por mis padres, que son mayores y no entienden que unos políticos y unos empresarios, nos hagan sufrir de esta forma y no hagan nada por solucionarlo, ni aun llegando la navidad.

Pese a todo, feliz Navidad y felices fiestas a los que defendéis la continuidad de nuestra empresa y de nuestros puestos de trabajo. También para estos políticos que nos gobiernan y para los empresarios que en su día decidieron el cierre de Elcogas. Mientras que ellos disfrutarán en familia, nosotros compartiremos el turrón y si es necesario las uvas de nochevieja, dentro de la central.

Eso sí, unidos, y más unidos que nunca.  La historia de Puertollano se sigue escribiendo. Os aseguro que habrá un antes y un después de lo sucedido en 2014, cuando quisieron cerrar y desmantelar la central de ELCOGAS. No estamos solos. Nuestras familias y la ciudad de Puertollano está con nosotros. Sus trabajadores y trabajadoras seguiremos defendiendo la industria y nuestro derecho al trabajo, hasta el último suspiro.

Ánimo compañeros y compañeras. Como siempre hemos dicho:

¡¡¡NO AL CIERRE DE ELCOGAS!!!