Sonora pitada de los trabajadores de RTVCM en rechazo a la «manipulación informativa»

Los trabajadores de la radio y la televisión autonómicas de Castilla-La Mancha han vuelto a vestirse de negro este viernes para mostrar su «rechazo absoluto» a aspectos que consideran inaceptables: «la manipulación, que se extiende sin excepciones a todos los programas con algún contenido informativo; o la creación de una plantilla paralela, que no para de crecer, especialmente en áreas como la Redacción de Informativos», informan las secciones sindicales en una nota firmada por los trabajadores.
negro
Además, han denunciado «la contratación irregular (como es el caso de personas que prestan servicios como falsos autónomos), los despidos de profesionales que llevaban muchos años trabajando en RTVCM, la falta de transparencia y la gestión irresponsable del dinero de los castellano-manchegos».

La iniciativa, que los trabajadores desarrollan el primer viernes de cada mes, ha sido secundada, según el sindicato, por la inmensa mayoría de la plantilla de las tres empresas públicas (Ente, Radio y Televisión) y en todas las delegaciones, mientras que los últimos en incorporarse han preferido hoy prescindir del negro en su vestuario.

Según el relato de los trabajadores, a las tres y cuarto de la tarde los empleados de los estudios centrales de Toledo y los del Centro de Producción de Albacete se han concentrado a la puerta de sus edificios, protagonizando una sonora pitada que se intensificó a la salida de la directora de Informativos de Televisión, Victoria Vigón, «quien saludó con una gran sonrisa a los manifestantes».

«Las jornadas de protesta se realizan bajo la presión de los responsables de los Servicios Informativos, que hacen toda clase de esfuerzos para que no se visualicen. Este mismo jueves a una redactora de la delegación de Albacete se le impidió salir en pantalla en una grabación destinada a emitirse el viernes, día en el que también se le ha prohibido realizar directos. El hecho, que supone una clara vulneración de derechos fundamentales como la libertad de expresión y de opinión, ha vuelto a repetirse este viernes: ningún redactor que fuera vestido de negro ha aparecido en la pequeña pantalla», reza la nota.

«Cada día más indignados, los trabajadores de RTV Castilla-La Mancha sienten que su profesión se está destruyendo con cada mal uso que se hace de ella, algo que se repite a diario y que afecta a todas las categorías». «En esta tercera convocatoria del Viernes a Negro», prosiguen los trabajadores, «los representantes sindicales reiteran que los trabajadores seguirán defendiendo una radiotelevisión pública de calidad, sin injerencias políticas y que represente un verdadero servicio público para los castellano-manchegos que la pagan con sus impuestos».

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