El encaje de blonda se ha dado a conocer en Alemania. Concretamente, dos piezas de este tipo de encaje almagreño de bolillos que se realiza con hilo de seda han formado parte de la exposición “Carbón y oro” que tuvo lugar el pasado fin de semana en la ciudad de Bochum, gracias a Pilar Montanos, encajera madrileña, apasionada del encaje en todas sus distintas modalidades, técnicas, tipos… Pero que si tiene que elegir un encaje español por su singularidad, su belleza, su delicadeza, ese es la blonda de Almagro.
Montanos aprendió hace más de 13 años de la mano de Vitorina, una de las pocas encajeras almagreñas que conoce y ha enseñado a hacer encaje con hilo de seda en Almagro. Y fue entonces cuando comenzó a realizar una mantilla de la que lleva hechas cinco tiras. Cuando viaja a cursos, exposiciones, encuentros relacionados con el encaje fuera de España, lleva en su bolso una de estas tiras de encaje y en uno de sus últimos viajes, “quería llevar algo que fuera representativo del encaje de España, y nada mejor que la Blonda de Almagro”. Y así fue como la persona que ha organizado la muestra en Alemania conoció la blonda en el 2010 y desde el primer momento quiso que estuviera en la misma.
“Fue una impresión entrar en la sala de las blondas y ver que parte de mi mantilla ocupaba todo lo largo de la habitación. ¡Nunca pensé que fuera tan espectacular!”, dice su autora y comparte a través de su blog cruzvueltacruz al ver sus tiras en la exposición de encajes en negro, dorado, negro sobre dorado o dorado sobre negro procedentes de muchos países como Suiza, Holanda, Austria, Alemania, etc.
Pilar Montanos, que se siente muy afortunada de haber representado a Almagro y a su blonda, explica que la mantilla negra española aún sin terminar suscitó “mucho interés y curiosidad, llamaba la atención que en el centro de España se hiciera un encaje tan primorosísimo”. Para la encajera madrileña, la blonda de Almagro es la gran desconocida en España, primero, y en consecuencia en Europa y en el mundo, “no hay nada igual”.
Para Montanos, “es una pena que no se de más a conocer y se promocione más porque la gente está muy interesada y es un encaje muy antiguo”. En este sentido, anima a crear un grupo de estudio y trabajo para relanzar la blonda de Almagro con el objetivo de sistematizar la enseñanza de este tipo de encaje: “es necesario realizar una sistematización, sacar los diseños y los diagramas y reproducirlos para que cualquier persona pueda hacer encaje de blonda”. Ahora son pocas las encajeras almagreñas que lo saben hacer y Natividad González es la única que imparte clases en Almagro como monitora del taller de la Universidad Popular. Montanos señala que es una de las técnicas más difíciles ya que es una técnica libre, “va la impronta de la encajera; es imposible que dos mantillas de blonda sean iguales porque va en la mano de encajera”.