El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha afirmado hoy que con los Presupuestos de 2015 “se continúa reduciendo el déficit, pero sin necesidad de disminuir el gasto público”. Durante el debate en las Cortes regionales sobre las enmiendas a la Ley de Presupuestos Generales de Castilla-La Mancha para el próximo ejercicio, el consejero de Hacienda ha asegurado que las cuentas públicas de 2015, el último presupuesto de la legislatura, “da perspectiva porque recoge la realidad de los recursos con que cuenta el Gobierno y en qué se van a emplear”.
Como todos los presupuestos anteriores del Gobierno de Cospedal, las cuentas del próximo año están marcadas por “la eficiencia y el control en el gasto, con el fin de garantizar unos servicios sociales de calidad, servir de estímulo a la economía y contribuir a la creación de empleo”, ha subrayado el titular de Hacienda.
En este punto, Romaní ha destacado el cambio de tendencia que presentan algunas partidas del presupuesto de 2015, que en total asciende a 8.206 millones de euros. “En estas cuentas sólo disminuyen su presupuesto los intereses de la deuda, las Cortes regionales y la Consejería de Hacienda”, ha señalado.
“Unas cuentas claras y rigurosas”
Romaní ha definido los presupuestos para el año 2015 como unas cuentas “claras, exactas y rigurosas”, que incluyen una previsión de crecimiento del 2,1 por ciento para Castilla-La Mancha, basada en informes de los más prestigiosos análisis financieros. “Invito a comprobar las previsiones que hicieron unos y otros en el pasado y ver el grado de cumplimiento de cada una”, ha afirmado.
En este sentido, el consejero de Hacienda ha cuestionado la legitimidad del Grupo Socialista para hablar de déficit público, cuando “en esta misma Cámara han defendido un déficit del 8 por ciento”.
“Llama la atención el fino olfato que se le ha activado al PSOE, teniendo en cuenta que sólo en la Consejería de Agricultura afloraron obligaciones pendientes de pago por 81 millones de euros en 2011”, ha concluido Romaní.
