Más de 300 delegados sindicales de CSI·F en toda la región, de ellos un centenar procedentes de Ciudad Real y provincia, se han concentrado hoy ante la consejería de Administraciones Públicas de la Junta de Comunidades, en la capital regional, para exigir la restitución de los derechos laborales y retributivos de los empleados públicos de Castilla-La Mancha y manifestar su oposición a la pérdida de más del 30% del poder adquisitivo y a la quinta congelación salarial anunciada para 2015.
Los delegados del sindicato mayoritario de la Función Pública en Castilla-La Mancha y en el conjunto del Estado español, se han manifestado para protestar por el mantenimiento del recorte salarial del 3%, único en la autonomía, «y absolutamente discriminatorio y dañino para más de 75.000 familias por el simple hecho de vivir en Castilla-La Mancha y padecer las políticas restrictivas de María Dolores de Cospedal», dice el sindicato.
Los representantes de CSI·F también han salido a la calle para reclamar la devolución de la paga extraordinaria de navidad del año 2012, ninguneada a los empleados públicos, y en su defecto que se abonen de forma inmediata los 44 días devengados de la extra de Navidad que ya reconocen los tribunales y que muchas administraciones han decidido reintegrar a sus trabajadores.
CSIF pide al gobierno Cospedal que cumpla con las sentencias en ese sentido, negocie con los representantes sindicales la forma de pago e incluya en las Cuentas del 2015 el abono de la paga extra, en un gesto que daría coherencia a su reiterativo discurso de recuperación económica.
La protesta de CSI·F, sindicato que ha anunciado un “otoño caliente” y movilizaciones en las calles, «se basa en la realidad de que Castilla-La Mancha es la Comunidad Autónoma donde más se han reducido los empleados públicos (24.500 en los 3 últimos años, según la Encuesta de Población Activa; un 9’34% en los últimos 5 años), y la que tiene, según el Servicio Público de Empleo, la mayor tasa de temporalidad en sanitarios y docentes y la región con mayor índice de emigración por motivos laborales, por lo que es necesaria una oferta de empleo público no sólo en Educación, sino también en el SESCAM y la administración general de la JCCM.»
Derechos perdidos
La concentración de hoy en Toledo ha vuelto a reclamar en la calle la devolución de derechos laborales que se consideraban inalienables, la reposición de las condiciones de incapacidad temporal, la jornada laboral de 35 horas semanales, los días de asuntos particulares y la generación de empleo para responder a las demandas de calidad en el servicio de todos los ciudadanos.
CSI·F «seguirá mostrando su malestar en concentraciones como la del día de hoy si no se habilitan foros de debate y de negociación adecuados para que los empleados públicos se sientan defendidos por sus representantes en la restitución de sus derechos, además de recuperar el prestigio, la dignidad y el reconocimiento a su labor, consideraciones depreciadas por nuestros dirigentes políticos, algo que no se puede seguir permitiendo y que CSI·F no va a dudar en denunciar tantas veces como sea necesario».
