UPyD Campo de Criptana.- Hace pocas fechas visitaba Campo de Criptana la Consejera de Fomento de Castilla-La Mancha, Marta García de la Calzada, acompañada del Delegado Provincial, Antonio Lucas-Torres, ejerciendo de anfitrión nuestro Alcalde, Santiago Lucas-Torres, tres cargos públicos entre cuyas funciones se supone que debe estar la de gestionar de forma eficaz el dinero de toda la ciudadanía.
Pues bien, buena parte del tiempo de la jornada laboral de estos tres responsables públicos consistió ese día en dar a conocer a los vecinos del pueblo el estado de las obras de la travesía y los beneficios que reportará una vez finalizadas dichas obras, como si no lo viéramos a diario quienes hemos pasado por ella durante los últimos meses o no lo hayamos oído ya en la televisión local y periódicos locales. Una obra que se lleva anunciando más de un año, desde el momento de su aprobación, y que lleva en marcha otro tanto.
Para organizar el evento se tuvieron que movilizar coches oficiales, chóferes, seguridad y personal de las televisiones públicas que suelen acompañar a los políticos en este tipo de actos. Además, se prepararon unos paneles informativos con fotos del proyecto y el importe de la obra para que la puesta en escena quedase mejor. Como es de suponer que la Consejera debe conocer con anterioridad los detalles del proyecto de la travesía a tenor del cargo que ostenta y que estará perfectamente informada por los técnicos de la obra en cuestión (presupuesto, incidencias, plazos, etc.), se puede concluir que esos paneles no sirven absolutamente para nada relacionado con una mejor ejecución del proyecto.
Habría que hablar claro de una vez y desde UPyD lo vamos a hacer: este tipo de actos y otros como visitas a fábricas e inauguraciones, no generan ninguna riqueza en la ciudadanía. Toda la parafernalia y todos los gastos asociados a estas visitas propagandísticas no sirven para otra cosa que no sea un recorrido publicitario del político de turno a costa del presupuesto público, ese que nos dicen que es tan escaso para algunas cosas, como, por ejemplo, la sanidad y la educación.
Estaría bien que, para ser justos, al igual que nos vienen informando de lo que cuestan los servicios públicos, como si estuviéramos cometiendo algún abuso cuando recurrimos a ellos, también nos informaran del coste de cada una de estas giras de autobombo que se financian con dinero público. Y cuanto antes mejor, porque ante la próxima cita electoral el trabajo de algunos políticos va a consistir en su mayor parte en la promoción personal viajando por los pueblos de nuestra región para intentar asegurarse su futuro y su sueldo (pagado por todos).
Ya es hora de que piensen en el interés público y dediquen el tiempo y el dinero a trabajar por la región y por sus pueblos y si quieren hacer campaña que se la paguen de sus bolsillos.