El director general de Cultura del Gobierno de Castilla-La Mancha, Javier Morales, ha informado hoy en rueda de prensa de las intervenciones arqueológicas y paleontológicas que forman parte de la orden de ayudas por valor de 420.000 euros que el Ejecutivo que preside María Dolores Cospedal ha aprobado para promover la investigación en estas materias en nuestra región. “Nuestro propósito con este tipo de actuaciones es devolver a la sociedad lo que invierte en cultura”, ha asegurado el director general.
Tal y como ha explicado el director general, en total se han concedido ayudas a 50 de las 77 solicitudes recibidas, de las cuales 7 pertenecen a la provincia de Albacete, 15 a Ciudad Real, 7 a Cuenca, 9 a Guadalajara y 10 a Toledo. El resto tienen carácter interprovincial, afectando a más de una provincia. S trata de la investigación en la Cultura de las Motillas de La Mancha y la valoración del estado de conservación de sitios con arte rupestre al aire libre de nuestra región.
Atendiendo al periodo histórico, el director general ha destacado que “prácticamente todas épocas históricas y prehistóricas presentes en Castilla-La Mancha están representadas”: tres proyectos paleontológicos, uno del periodo neolítico, tres del calcolítico, cuatro de la Edad de Bronce, uno del Bronce final, 19 de la Edad de Hierro, 15 corresponden de la época romana, 18 a la Edad Media, tres de la época moderna y uno a la contemporánea.
Javier Morales se ha referido al “apoyo y respaldo de las entidades de investigación y de los ayuntamientos que se han hecho cargo de estos proyectos”. Del total de expedientes aprobados, 18 consistorios han sido beneficiados, 27 universidades y 5 proyectos se han concedido a organismos públicos de investigación, concretamente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y al Instituto Geográfico Minero Español (IGME). Según ha destacado, “el hecho de que estén presentes las universidades es muy importante porque, gracias a ellas, se están formando numerosos futuros arqueólogos y paleontólogos”.
El objetivo que persigue el Ejecutivo de Castilla-La Mancha con esta orden de ayudas es, por un lado, “mejorar, promover y fomentar la investigación en nuestra comunidad autónoma”; y por otro, “que sirva de cantera para futuros proyectos de investigación para arqueólogos y paleontólogos”.
Compromiso de los Ayuntamientos con su patrimonio arqueológico
Mención especial ha hecho el director general “al compromiso creciente de los ayuntamientos con su patrimonio arqueológico”. En este sentido, ha asegurado que “las entidades municipales conceden cada vez más importancia a la conservación, el conocimiento, la investigación y la promoción de su patrimonio, conscientes de que es una fuente futura generadora de recursos turísticos”.
En este punto, Morales ha destacado el “cambio de mentalidad” en materia cultural -promovido desde el Gobierno regional- que aboga por la “corresponsabilidad entre administraciones y la búsqueda de financiación público-privada, una fórmula que, a su juicio, “consigue beneficiar a más proyectos, a más entidades locales y a más ciudadanos”.
Cambio de tendencia para devolver a la sociedad lo que invierte en cultura
Asimismo, el director general ha hecho hincapié en que “esta orden de ayudas marca un cambio en la tendencia que se venía planificando en materia de investigación arqueológica en Castilla-La Mancha”, teniendo en cuenta, que las anteriores campañas se basaban única y exclusivamente en excavaciones, obteniendo “un volumen inmenso de materiales arqueológicos que a día de hoy están sin estudiar y sin investigar”.
En contraposición y para evitar este tipo de situaciones, la orden de ayudas del Gobierno regional introduce el estudio de materiales y evita la obligatoriedad de acometer únicamente excavaciones. “Desde el Gobierno de Cospedal estamos convencidos de que todo lo que la sociedad aporta a la cultura y al conocimiento de nuestro patrimonio, tiene que revertir en ella. Hasta ahora –ha puntualizado- no estaba revirtiendo suficientemente porque esos materiales, al no ser estudiados, no formaban parte de las colecciones museográficas”.