Castilla-La Mancha ha conseguido en 2013 ser la Comunidad Autónoma multiprovincial con mayor número de intervenciones coronarias a causa de un infarto agudo de miocardio, en proporción a la población, según datos de la Sociedad Española de Cardiología (SEC).
En este periodo, el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha atendió 371 casos de infarto agudo de miocardio por millón de habitantes, una proporción muy superior a la media española, situada en 289 intervenciones por millón de habitantes.
Así se ha puesto de manifiesto en las Jornadas Nacionales sobre Angioplastia Primaria que se celebran esta semana en el Hospital General Universitario de Ciudad Real (HGUCR), en las que se analizan los estándares de calidad de la asistencia cardiológica en las distintas Comunidades Autónomas y la vinculación con las cifras de mortalidad por infarto agudo de miocardio.
En este aspecto Castilla-La Mancha es la tercera región española con menor tasa media de mortalidad por infarto, sólo por detrás de Navarra y Cataluña.
Para Luis Carretero, gerente del SESCAM, estas cifras vienen determinadas por dos factores fundamentales “el excelente trabajo de coordinación de los Servicios de Urgencias y Emergencias con los hospitales de referencia y las garantías que ofrece el sistema de salud público en el acceso inmediato de los pacientes a la angioplastia primaria”.
La coordinación en red protocolizada en Castilla-La Mancha a través de Código de Reperfusión Coronaria (CORECAM) resulta fundamental para actuar de forma inmediata y aumentar la supervivencia tras un infarto, ya que el tiempo medio de respuesta desde que el paciente sufre una obstrucción de la arteria hasta que se practica una angioplastia primaria no debe superar los 90 -120 minutos.
La angioplastia primaria es la técnica más recomendada para el tratamiento del infarto agudo de miocardio, que consiste en desobstruir la arteria coronaria mediante la aspiración del trombo y la implantación de un stent o malla metálica para resolver la estrechez subyacente.
Durante el año 2013 en nuestra región, el 87 % de los pacientes con infarto agudo de miocardio pudieron ser asistidos y trasladados a un hospital cardiológico en los primeros 90 minutos tras el diagnóstico electrocardiográfico, con un tiempo medio de 60 minutos.
El CORECAM
El Código CORECAM es un procedimiento asistencial de ámbito regional, en red, que pretende garantizar el acceso de los ciudadanos a las terapias de reperfusión coronaria en el caso de que presenten un infarto de miocardio, allá donde se encuentren, dentro de la región y sea cual sea el modo de acceso a los recursos de urgencias (a través del 112, de centros de Atención Primaria o de Centros Hospitalarios).
En la práctica, los objetivos prioritarios son la detección precoz, la asistencia inmediata y el traslado ágil y seguro, esté donde esté el paciente, a un hospital que pueda realizar un cateterismo de urgencia en un tiempo máximo de 90 minutos desde el diagnóstico de la situación a través del electrocardiograma.
En nuestra región son 4 los hospitales capacitados para ello, Albacete, Ciudad Real, Guadalajara y Toledo. En aquellos pocos casos que los pacientes se encuentren muy alejados del hospital para realizar una angioplastia primaria, es el mismo personal sanitario de emergencias, al confirmar el diagnóstico, el que aplica una terapia medicamentosa sustutiva (fibrinolisis) en el propio lugar donde se encuentre el paciente trasladando, igualmente, al hospital de referencia desde un punto de vista cardiológico, para su control posterior.
Detección precoz
Un aspecto muy importante a considerar, a efectos de seguir mejorando en la estrategia de optimizar el diagnóstico y tratamiento de los pacientes afectos de infarto de miocardio es el diagnóstico precoz.
En nuestro medio se observa, todavía, un importante retraso, de hasta 119 minutos de media, en la decisión de acudir a los recursos sanitarios de urgencias, por parte de los ciudadanos. Es imprescindible que éstos reconozcan precozmente los síntomas del infarto de miocardio y sepan alertar de una manera eficaz a los recursos de urgencias y emergencias sanitarias, a través del número 112.
El porcentaje mayor de mortalidad se produce en la primera hora de sintomatología y se debe a la presencia de una parada cardiaca; ante ello es imprescindible que el ciudadano con dolor intenso en el pecho que dura 5 minutos o más, contacte de manera inmediata con el 112 donde los profesionales (médicos y enfermeros) que la Consejería de Sanidad tiene allí, le asesorarán y le activarán el recurso más adecuado si fuera necesario.