Multimedia.- Apasionados del vino de toda España se han dado cita estos días en Experiencia Verema Madrid para probar 70 grandes vinos del país, entre ellos, las nuevas añadas de Dehesa del Carrizal, la bodega cuyas vides se encuentran en Retuerta del Bullaque.
Beatriz Munsuri, una de las responsables comerciales de esta bodega ubicada en Retuerta del Bullaque, se mostró encantada de “que nuestros nuevos vinos se disfruten en un evento que reúne a miles de profesionales y amantes del vino de toda España, una comunidad, la de www.verema.com que cuenta con casi 50.000 seguidores”.
Durante la actividad, Munsuri no sólo explicó a los numerosos interesados las cualidades específicas de estos vinos de pago, sino que detalló las características singulares del paraje en el que crece el fruto, con un microclima que permite una maduración lenta y armoniosa, responsable, junto a las especificidades del terreno, “de un ‘terroir’ reconocible y único”, señalaba.
Los vinos que pudieron probarse son MV 2011, Dehesa del Carrizal Chardonnay 2012, Dehesa del Carrizal Syrah 2011, Dehesa del Carrizal Cabernet Sauvignon 2011 y Colección Privada 2011.
Algunos de los profesionales del vino que pasaron por el espacio reservado para Dehesa del Carrizal, como Palmiro Muñoz, director del restaurante ‘La joya’, de la madrileña localidad de Arganda del Rey, mostraron su sorpresa por las nuevas añadas. “Me ha gustado especialmente Chardonnay 2012, en el que me ha encantado el fondo de toffee. Sorprendente”, aseguró el restaurador.
Ignacio Sanjuán y Enrique Andrés, dos enólogos alcarreños, aseguran conocer los vinos de la bodega “desde el principio”, y “aprecian los cambios de los nuevos vinos”, que califican como “muy interesantes”. En la misma línea que la opinión de un apasionado madrileño del vino, Jesús Gómez, que también conoce los vinos de la bodega desde hace años y que ahora detecta “muy buena materia” en los nuevos, “por lo que le apetece seguir conociéndolos mejor”.
Bodega Dehesa del Carrizal y su riguroso sistema de producción artesanal
La bodega Dehesa del Carrizal elabora sus vinos siguiendo una rigurosa normativa en materia de calidad bajo una Denominación de Origen Protegida, una distinción limitada actualmente a quince bodegas españolas, que garantiza que todo el proceso de producción se desarrolla en la misma finca, con viñedos propios y uva cuidadosamente seleccionada, en un proceso artesanal. El marco regulatorio de elaboración es muy estricto e impone rendimientos bajos, rigurosos tiempos de crianza y exhaustivos controles de calidad que, unidos a la singularidad del enclave, los suelos y el clima, en plenos Montes de Toledo, muy cerca del Parque Nacional de Cabañeros, dan como resultado vinos excepcionales.