El Campo de Fútbol de Alcázar de San Juan va a recibir el nombre del que fuera jugador de fútbol y preparador físico de la Selección Española, el alcazareño Manuel Delgado Meco. Así lo anunció este jueves el presidente del Instituto Municipal de Deportes, Manuel de la Guía, en la clausura del curso académico del Instituto de Educación Secundaria Juan Bosco, en la que ejerció de padrino de la promoción el propio Delgado Meco.
De la Guía explicó que la dedicatoria del estadio municipal a quien es Hijo Predilecto de Alcázar fue una propuesta del alcalde, Diego Ortega, a la que se sumó el conjunto del equipo de Gobierno. Con este cambio de denominación, el Ayuntamiento quiere honrar a Delgado Meco, que ha llevado el nombre de Alcázar por todo el mundo, tanto en los equipos en los que ha jugado a lo largo de su carrera como en la Selección Española, siendo corresponsable de numerosos éxitos deportivos.
En lo que respecta al acto de clausura del curso del IES Juan Bosco, Manuel de la Guía, que fue alumno del centro, subrayó que en el instituto, así como en otros ámbitos de la vida, los alumnos no se forman únicamente desde el punto de vista profesional, sino también personal, “a través de multitud de experiencias que marcan durante unos años que nunca se olvidan”.
Por su parte, el director del instituto, Juan José Arias, deseó mucha suerte a los alumnos que han finalizado sus estudios en el centro y que ahora se enfrentan al resto de sus vidas con la vista puesta en un futuro laboral. En este sentido, señaló que “antes cuando se acababa la Formación Profesional se salía de aquí con un puesto de trabajo; ahora la situación es más complicada”. En cualquier caso, les animó a seguir adelante, ya sea buscando un trabajo o continuando, quienes así lo deseen, con su formación. Además, Arias se mostró muy orgulloso de que el cien por cien de los alumnos del IES Juan Bosco que se han presentado a las Pruebas de Acceso a Estudios de Grado (PAEG) las han aprobado.
El padrino del curso, Manuel Delgado Meco, que se mostró muy agradecido al Ayuntamiento por el reconocimiento anunciado de poner su nombre al estadio municipal, animó a los alumnos a fijarse objetivos y motivaciones en los distintos retos personales de cada uno. Asimismo, realizó un paralelismo con el mundo del fútbol al valorar especialmente de la vida la interacción con otras personas, que sería como el pase de balón en los partidos. “Lo máximo es el gol, pero no olvidéis la importancia del pase, que es la convivencia, el diálogo y la comunicación”, afirmó.
Finalizados los discursos, tuvo lugar la entrega de diplomas a los mejores expedientes académicos de cada curso y cada ciclo formativo, así como la imposición de becas a los alumnos que dejan ya el instituto.
