La diputada regional del PSOE, Blanca Fernández, ha pedido a los miembros del Gobierno de Castilla-La Mancha y a los dirigentes del Partido Popular que “por coherencia, pero sobre por respeto a los ciudadanos y ciudadanas de esta región, no pueden seguir de espaldas a la realidad y tienen que dar un giro a sus políticas, dejar a un lado la propaganda de la falsa recuperación y dedicarse a aplicar medidas urgentes que de verdad ayuden a las personas”.
En concreto, Fernández se ha referido a algunos de los últimos indicados conocidos esta semana, entre ellos la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE), que sitúa a Castilla-La Mancha como la comunidad autónoma donde más personas viven por debajo del umbral de la pobreza, exactamente un 31,3% de toda la población y que supone 11 puntos más que la meda nacional.
Fernández afirma que “ese es, sin duda, el peor indicador que puede existir, ya que se traduce en que más de 765.000 familias lo están pasando muy mal e incluso están pasando hambre en nuestra región”.
A juicio de la parlamentaria socialista, las administraciones tienen la obligación y la responsabilidad de solventar situaciones límite como estas, de ahí que haya manifestado que “la señora Cospedal no puede pasar ni un minuto más sin actuar para atajar la pobreza, las desigualdades y los problemas sociales que cada día van a más como consecuencia de sus recortes sin piedad”.
En este sentido, ha vuelto a demandar un plan de empleo urgente y extraordinario para atender a los hogares que tienen a todos sus miembros en paro, a los parados de larga duración, a los 134.000 castellano-manchegos que ya no tienen ninguna prestación ni subsidio y un plan específico contra el paro juvenil, todo ello acompañado de una necesaria reposición de los servicios básicos recortados a límites alarmantes.
La diputada regional del PSOE ha lamentado que esta sea la radiografía de la región, «una región en la que las personas dependientes han retrocedido a niveles de 2010, y en el caso de los grandes dependientes a niveles de 2008. Esta es la herencia del desmantelamiento protagonizado por la señora Cospedal que será muy difícil de olvidar”.
En cuanto al apartado sanitario, Blanca Fernández ha dicho que “no solo tenemos menos médicos, enfermeras y matronas en Castilla-La Mancha que en el resto de España, sino que además se mueren pacientes en los hospitales sin ser atendidos porque no hay profesionales suficientes”.
En concreto, Fernández ha recordado la muerte de dos pacientes en mitad del colapso de las Urgencias del hospital de Toledo, situación que incluso ha llevado a que los médicos hayan presentado denuncia ante la Fiscalía; un centro en el que el pasado viernes falleció una joven nicaragüense tras permanecer cuatro horas en Urgencias sin ser atendida, y ahora se conoce una nueva denuncia de la familia de un paciente contra los hospitales de Cuenca y Toledo por otro fallecimiento ante un supuesto caso de desatención sanitaria.
Fernández ha concluido pidiendo “medidas urgentes para solucionar de forma contundente los problemas de la gente, a ello es a lo que tiene que estar Cospedal”.