Si te ha pillado esta estación del año apunta estos sencillos consejos para que tu peso en esta época no se dispare más de lo normal y sobre todo porque en esta época hay más facilidad para coger una deshidratación con lo que te proponemos estas ideas para que puedas pasar un verano cómodo y seguro.
En verano cambiamos nuestra rutina, entramos y salimos más , cambios de residencia, que hacen que nuestros hábitos se vean modificados más de lo normal por eso te proponemos estos consejos para que tu alimentación en el embarazo no se vea afectada.
1. Sigue una dieta variada y equilibrada: esto significa que contenga variedad de alimentos, sea suficiente cantidad sin pasarse, y sea agradable, no se trata de estar con pescado hervido todo el día y a base de ensaladas.
2. Realiza un menú semanal, donde pongas 6 comidas al día, distribuidas en desayuno, media mañana, comida, merienda, cena y algo antes de acostarte, no te faltes ninguna, sino irás con más hambre a la siguiente y no te aseguramos que la hagas en cantidad suficiente…
3. Bebe 2,5 litros de agua al día para evitar la deshidratación, la cual debe ser tu bebida principal, por eso es conveniente que cada vez que salgas te acompañes de una “botellita” en el bolso.
4. Sustituye las bebidas energéticas por zumos naturales de frutas ya que te ayudarán a combatir el estreñimiento y te proporcionarán saciedad.
5. Intenta sustituir los helados por granizados naturales, si los haces en casa mucho mejor, ya que puedes elaborarlos con piel y que contengan más fibra, además los granizados aportan menos calorías y menos grasas que los helados.
6. Consume más de 3 raciones de verduras y frutas, aprovéchate de las que estén en temporada y dale un toque diferente cada día: ensaladas, rollitos, crepes, macedonias…
7. No te quites los caprichos, eso sí, dátelos una vez por semana, reservando un día para ello, así lo disfrutarás mucho más. Aquí englobamos todos los alimentos de consumo ocasional y que contienen muchas grasas saturadas y calorías como: helados, bollerías, repostería, chocolates, etc.
8. Empieza el día con un desayuno completo que contenga:
– 1 ración de hidratos de Carbono: Por ejemplo 2 tostadas de pan, si es integral mejor.
– Lácteos: 2 yogures o un vaso de leche.
– Fruta: por ejemplo cualquier cítrico te puede venir muy bien.
9. Aprovecha para consumir más cantidad de pescado, rico en ácidos grasos esenciales ( Omega 3), especialmente el azul como anchoas, boquerones, sardinas…
10. Realiza una hora de ejercicio físico al día, evitando las horas de mayor exposición solar, realizándolo o bien por la mañana temprano o al anochecer, en otras horas puedes aprovechar e ir al gimnasio. Los ejercicios más recomendables son: caminar, nadar, Pilates…
Y recordad, el verano es para disfrutar, aprovechad para descansar y comer con moderación, y sobre todo no olvidéis el protector solar.
¡Feliz verano!
Margarita de Toro
Los consejos de tu matrona
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