El concejal de Servicios Jurídicos, Mariano Ormeño, ha denunciado el doble discurso del PSOE en relación al tema de Aguas de Alcázar, ya que “dicen una cosa de cara a la opinión pública y otra muy distinta en sede judicial”.
Tras hacer mención a una información publicada este sábado en el diario El Mundo sobre las acciones judiciales que pesan sobre el ex alcalde, José Fernando Sánchez Bódalo, al utilizar la empresa pública de Aguas para la realización de obras millonarias adjudicadas siempre a las mismas empresas sin seguir los procedimientos legales de contratación (la información habla de 18 millones de euros a tres empresas), Ormeño ha asegurado que “el PSOE miente cuando dice que lo ha aclarado todo en el juzgado”.
Así, ha indicado que en su declaración del pasado día 14, Bódalo dijo que ya conocía la existencia de una deuda millonaria en Aguas de Alcázar en 2009, mientras que a la opinión pública le dicen una y otra vez que la deuda es un invento del actual equipo de Gobierno. Además, declaró que para evitar la quiebra tuvo que tomar la decisión de transformar la deuda a largo plazo, una decisión que tomó en solitario como presidente del Consejo de Administración de Aguas de Alcázar, pero que legalmente le correspondía tomar a todo ese Consejo, conformado por la totalidad de los miembros de la Corporación Municipal, al tener el Ayuntamiento el cien por cien del capital social de la empresa. Esta irregularidad también la reconoció el ex alcalde en su declaración.
Por otra parte, Mariano Ormeño puso como ejemplo de la mala gestión socialista al frente de Aguas las obras de eliminación de barreras arquitectónicas en la zona del mercadillo, unas obras por las que Aguas de Alcázar presentó varias facturas al Ayuntamiento, tras lo que la entonces concejal de Hacienda, Ana Belén Tejado, firmó un decreto de solicitud de subvención a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para que el Gobierno regional abonase al Consistorio 169.000 euros por esas obras.
Sin embargo, cuando vino un inspector de la Junta comprobó que esas obras no se habían realizado. Es decir, Aguas presentó facturas por una obra no realizada por la que después el Ayuntamiento pidió una subvención al Gobierno regional. Según Ormeño, Bódalo reconoció en el juzgado que se certificó dicha obra sin haberse ejecutado, por lo que el edil de CxA habló de “engaño a la Junta para obtener una subvención, fraude, estafa, mentira; llámenlo como quieran”.
Éste es sólo un ejemplo más de la gestión socialista al frente de Aguas de Alcázar, sobre la que, según Mariano Ormeño, el anterior alcalde y Tejado deberían dar explicaciones a la ciudadanía en lugar de mentir, en lo que considera “una estrategia”. “Confían en la lentitud de la justicia y en que la sentencia de todo este caso no va a llegar antes de las elecciones municipales”, ha afirmado.
Según la información de El Mundo, había un alto cargo de Aguas que cobraba, además, el dos por ciento del presupuesto de cada proyecto que realizaba Aguas, motivo por el que habría cobrado 140.000 euros extra en 2008 y 124.000 en 2009.
Mariano Ormeño indicó que tras las declaraciones de Bódalo y del ex concejal Benito Montiel, el próximo 2 de mayo está llamado a declarar también como imputado un técnico. Después, tras los diferentes análisis de la documentación y los interrogatorios, se tendrá que cerrar la instrucción y entonces decidir si el caso se eleva al Juzgado de lo Penal de Ciudad Real.