J. Carlos Sanz.- El futuro de la maltrecha factoría que Solaria posee en Puertollano queda condicionado al resultado del referéndum que durante la mañana de hoy llevarán a cabo los 213 trabajadores que aún permanecen. Lo que finalmente depare la votación de la plantilla será lo que determine la ratificación o desestimación de la última propuesta que in extremis lanzaba la empresa al comité durante las negociaciones del pasado jueves.
Como explicaba Jesús Manchón, presidente del comité, no existe una postura unitaria de las secciones sindicales para que los trabajadores voten a favor o en contra de una propuesta que llegó a última hora y que Manchón califica de mala “aunque la inicial era catastrófica”. Todo se deja a voluntad de la plantilla aunque la sección sindical de CTI-CSIF ya se posicionaba mediante un comunicado donde dejaba patente su negativa a firmar una propuesta que tildaba de “fracaso” y “atropello”.
En el seno del comité dejan claro que la propuesta de Solaria es unilateral y que no cuenta con ningún preacuerdo. Manchón lamenta que sea la mano de obra directa “la que pague el pato”, pues los 23 trabajadores que proseguirán en la factoría (en el caso de ratificarse favorablemente el acuerdo) se distribuirían de la siguiente forma: siete de ellos para labores de vigilancia y mantenimiento mientras que el resto sería personal de logística así como departamento de compras y ventas.
Tampoco quedan claras las intenciones de Solaria acerca de una futura reactivación de la producción de paneles pues la empresa supedita lo anterior al cambio legislativo en materia energética. Según Manchón, actualmente Solaria centra su negocio en la compra-venta y mantenimiento de huertos solares. En el hipotético caso de que se retomara la producción, la empresa echaría mano de la bolsa de trabajo creada desde el 2012 y a la que podrían acogerse voluntariamente los trabajadores despedidos en este último ERE en caso de votar a favor de la propuesta.
La incógnita se despejará en unas horas. En el comité no se decantan por ningún resultado. Se limitan a recordar que si el resultado de la votación es desfavorable se vuelve a la propuesta inicial: cierre total del centro de trabajo, extinción del 100% de los contratos y abono de 20 días por año en concepto de indemnización en varios plazos, es decir, fraccionamiento de la misma como mínimo en tres pagos trimestrales o en el momento que hubiera disponibilidad en tesorería.
Si se vota a favor de la última propuesta, recuerdan que se mantendrá abierto el centro de trabajo, se mantiene a 23 trabajadores, la fábrica no se desmantela, existe un compromiso de reactivar la actividad industrial si hay demanda de productos en los mercados, posibilidad de acogerse voluntariamente a la bolsa de empleo existente y la empresa pagará las indemnizaciones asumiendo 23 días por año trabajado.
Es este último apartado el que se antoja crucial para el devenir de la votación y lo que algunos trabajadores interpretan como la táctica del burro y la zanahoria. La empresa se compromete a hacer efectivo el abono de las indemnizaciones en dos plazos. Uno primero donde se pagará el 50% de los 23 días de indemnización (un promedio de 4.200 euros por empleado) junto al pago del 100% del preaviso (promedio aproximado de 800 euros por empleado) y pago del 100% de las vacaciones (promedio de 160 euros por empleado). Y un segundo plazo para abonar el 50% restante de la indemnización (otro promedio de 4.200 euros por empleado) a los tres meses desde que se realizase la extinción del contrato de trabajo.
Por último, Manchón recordaba que la empresa abonará el 50% de la nómina de enero y el 100% de la nómina de febrero a lo largo de los días 19 y 20 de marzo. Y en el supuesto de producirse algún retraso respecto al pago del segundo plazo de la indemnización, la empresa abonaría en concepto de penalización un 5% más sobre la parte pendiente de abonar por cada mes de retraso.
[…] parece haber optado por salvar su dignidad ante las siempre cicateras propuestas de la empresa. Los 181 trabajadores de Solaria reunidos hoy en Asamblea han dado un golpe encima de la mesa, se han plantado ante la dirección, y han […]