Con el objetivo de romper el estereotipo de mujer y cocina, y de visibilizar a todos los hombres que participan en los cursos de cocina que organiza el Centro de la Mujer de Manzanares, la plaza de la Constitución acogió en la mañana del sábado una fritada de huevos en la que más de doscientos hombres se pusieron el delantal y cogieron las espumaderas y la sartén para freír un total de seiscientos huevos que fueron degustados por el público con pan, vino o agua.
En la primaveral mañana del 8 de marzo, para seguir promoviendo la corresponsabilidad, tuvo lugar esta simpática actividad titulada “Hombre, atrévete: acércate a la sartén”, con gran implicación de los alumnos de los talleres de cocina para hombres que organiza a lo largo del año el Centro de la Mujer. Desde las doce y media del mediodía y hasta las tres de la tarde, decenas de hombres se animaron a freír huevos, perdiendo muchos de ellos el miedo a algo tan sencillo y básico en cocina.
Y es que, según las estadísticas sobre el uso del tiempo en el hogar, la implicación de los hombres en aspectos como la cocina es mínima en comparación con el tiempo que dedican las mujeres, de ahí que este acto sirviera para perder el miedo a la cocina. Durante el mismo también se distribuyeron encuestas para que hombres y mujeres las completaran y comprobaran a qué dedican el tiempo en el hogar y fuera de él, evaluando cómo de corresponsables son.
Todos los participantes recibieron un delantal conmemorativo y, al terminar sus huevos, una medalla del “Rey del huevo frito”, obsequio elaborado por las usuarios del Centro Ocupacional. Entre los más de doscientos hombres de todas las edades que participaron hubo concejales y el propio alcalde, Antonio López de la Manzanara.
