El Ayuntamiento de Valdepeñas elaborará un Plan Municipal Contra la Pobreza Energética con el objetivo de prevenir y garantizar el derecho a la ciudadanía a los suministros básicos del hogar que permita identificar, prevenir y corregir situaciones detectadas. Esta iniciativa se llevará a cabo una vez que la sesión plenaria apruebe hoy, previsiblemente, la propuesta, derivada de sendas mociones que se presentaron en comisión informativa por PSOE e IU y que han sido consensuadas de forma única y se llevará a pleno de forma conjunta por el PSOE, IU y PLJ.
La moción exige al Gobierno de España establecer un IVA reducido para el precio de gas y la electricidad a nivel doméstico y a la aprobación de una Ley de medidas para prevenir la pobreza energética que regule el sistema de suministros básicos del hogar e incluya mecanismos que prime el ahorro y penalice el consumo ineficiente, garantizando que las tarifas no sean objeto de mercado, estableciendo precios sociales y elementos de fiscalidad energética favorables para las familias con bajos ingresos económicos, estableciéndose una tregua invernal e impidiendo el corte de suministro.
También solicita al gobierno de Castilla La Mancha que en el ámbito de sus competencias se realicen cuantas acciones sean necesarias, tanto de regulación como de intermediación ante las compañías suministradoras así como de establecimiento de ayudas, para evitar que se puedan producir cortes de suministro eléctrico o de gas entre los meses de noviembre a marzo en aquellas familias que se encuentren en una situación de vulnerabilidad social acreditada por los servicios sociales.
La propuesta también señala que el Estado español es el país de la Unión Europea con los precios de la electricidad más caros, después de Malta y Chipre (FACUA 2012). Según datos de Cruz Roja de 2012, en dos años el gas se ha incrementado el 22%, la luz del 34%, el agua el 8,5% y la bombona de butano el 23%. Según Eurostat, desde 2001 a 2012 la factura de electricidad en España cuesta de media un 103,1% más. Si se cuenta desde 2006 hasta los últimos incrementos, en el caso del pequeño consumidor la subida es del 88%, lo que, unido a la crisis económica, agrava la dificultad de afrontar la factura energética de las personas más vulnerables, haciendo crecer con fuerza la pobreza energética y los cortes de suministro.
