Luis Mario Sobrino Simal.- En timpos de crisis es difícil que alguien ofrezca su arte gratis en la calle, desafiando vientos y mareas. Esta mañana el centro de Ciudad Real estaba amenizado por personas como estas que bajo facetas diferentes intentaban transmitir a la ciudadanía un poco de paz y sosiego.
Lo han conseguido. Los viandantes parábamos al oir la música de lejos y echábamos alguna moneda aparte de apluadir y grabar su arte.
Dos chicas jóvenes interpretando conocidos temas con sus clásicos instrumentos a un lado de la calle y al otro un titiritero como otra forma de expresión artística, una pareja inmóvil a la que el daba vida «metiéndose dentro de ella» literalmente e interpretando viejas melodías.
Lo dicho, Cultura y arte musical y teatrero público y para el público en general.
Minutos de paz y sosiego en esta mundo tan turbulento.
Me acordaba estos momentos de mi gran amigo Miguel del Teatro de la Sensación que también empezó así, haciendo arte, en su caso como mimo callejero.