Carlos Etxeba.- Como autor de la comedia LAS CUATRO PERLAS ROSADAS DE BENGALA, que el grupo Epidauro va a representar el próximo viernes día 18 de Octubre a las 21 horas en el Auditorio Pedro Almodóvar de Puertollano, quisiera precisar el papel que los aristócratas de todo el mundo han desempeñado en el latrocinio de toda clase de obras de arte a lo largo de la historia.
El aristócrata se puede definir como una persona rica que goza de un gran prestigio social. Una de las cosas que más prestigio social acarrea a los aristócratas es la posesión de importantes obras de arte.
Todas las casas famosas de la aristocracia en el mundo se afanan por exhibir su patrimonio cultural con el mayor refinamiento posible, aunque muchas veces su origen haya sido el robo.
¿Podríamos considerar como un robo aristocrático la apropiación de los bienes de la iglesia católica efectuada por Enrique VIII fomentando la herejía para justificar el robo? La guerra lo puede justificar todo y todas las obras de arte de la Iglesia Católica pasaron a poder de la casa real inglesa.
Posteriormente otro aristócrata inglés Sir Francis Drake se dedicó a saquear a la armada invencible, contribuyendo a su derrota. Para los ingleses es un héroe, pero para los españoles es simplemente un ladrón pirata
En Francia se hizo famosa la demanda judicial valorada en dos millonea de dólares que presentó el museo Getty sobre el díptico medieval LA ESTIGMATIZACIÓN DE S. FRANCISCO CON STA. CECILIA Y S. VALERIO CORONADOS POR UN ÁNGEL pintado anónimamente en la corte papal de Avignon. El cuadro pertenecía a una familia aristocrática. Un miembro de la familia se apropió de él sin contar para nada con los demás miembros aristocráticos y lo vendió por su cuenta y riesgo al museo Wildenstein de Nueva York. Después este museo lo vendió al museo Getty,sin saber el origen del latrocinio,y el lío judicial que se armó fue enorme.
En los momentos actuales la aristocracia ha perdido su poder adquisitivo. Es cosa sabida que después de la revolución rusa muchos aristócratas rusos tuvieron que trabajar en París como taxistas. Cada vez son más los nobles que se casan con plebeyos millonarios que aspiran a ostentar sus títulos, dando lugar a la aparición de los ladrones de guante blanco.
Son famosos los robos de estatuas románicas y góticas en las iglesias españolas, así como el robo del códice Calixtino de la Catedral de Santiago de Compostela.
Erik el belga (pintor, anticuario y ladrón) robó más de 6.000 obras de arte sacro. Ha dejado para la posteridad los siguientes comentarios muy significativos:
1-El arte da mucho dinero. Yo me he movido en un alto nivel social y la gente no sospechaba que yo era un fugado de la cárcel.
2- Todo lo que está en los museos está robado o expoliado. Gran parte del museo de Kabul pertenece a un francés que lo expone en el Louvre. Bangladés es un país que ha sido totalmente expoliado y todas sus obras se encuentran en museos internacionales. No hay grandes colecciones sin mala procedencia.
3- Los nuevos expolios se producen en Irak y en Libia, países con problemas. El tráfico legal hoy día se produce a través de las grandes empresas.
Se han sofisticado tanto los ladrones de guante blanco que no solamente se comercializan obras de arte robadas, sino todo lo que se pueda vender y comprar por dinero como por ejemplo la salud de los pueblos, los alimentos, las medicinas, el cambio climático, las guerras interesadas, hasta el tráfico criminal de pateras.
En mi comedia he expuesto a unos aristócratas que hacen de la rapiña de obras de arte su verdadero sentido de la vida y que se transforman en auténticos vulgares ladrones de guante blanco.
El grupo de teatro Epidauro, experto en lides teatrales, va a representar mi comedia LAS CUATRO PERLAS ROSADAS DE BENGALA. A todos ellos y en especial a su directora Gema Céspedes Palomares les envío un saludo muy especial.