Una decisión geopolítica de la Orden de Calatrava en 1239, para hacer frente al gran poder de la Orden de Santiago, dio origen a Manzanares, una villa que estuvo poblada en sus inicios por campesinos, pastores y caballeros, como sede que fue de una encomienda de esta orden militar. Esta es una de las conclusiones de la mesa redonda sobre el origen de la ciudad celebrada el pasado sábado en la ermita de San Blas organizada por la Asociación Cultural “El Zaque” con el título “¿Caballeros o pastores?” y encuadrada dentro de los actos de las II Jornadas Medievales de Manzanares.
La mesa redonda, que contó con la colaboración del Ayuntamiento de Manzanares y de la Cofradía de San Blas, llenó esta ermita situada junto al Castillo de Pilas Bonas, núcleo sobre el que creció Manzanares y que se construyó entre los años 1239 y 1275, según los datos aportados por los ponentes.
Teodoro Sánchez-Migallón Jiménez, presidente de “El Zaque”, moderó el acto y presentó a los Doctores en Historia que la ilustraron con sus conocimientos. Se trata de Clara Almagro Vidal, que en el libro programa editado con motivo de las II Jornadas Medievales publica un artículo sobre población, encomienda y territorio en Manzanares a finales del Siglo XV, y del manzanareño Juan Ramón Romero Fernández-Pacheco, Archivero del Estado, director del Departamento de Conservación de Documentos del Archivo Histórico Nacional en Madrid y autor del libro “Manzanares, 800 años de historia”.
Romero se centró en explicar qué certidumbres hay históricamente demostrables, y cuáles son las incertidumbres, para sentar unas bases. Para ello dio unas fechas, hechos y acontecimientos históricos clave en el origen de Manzanares, “de los que no hay dudas y están documentados”. Para el historiador, sobre esa base, todas las aportaciones futuras serán bienvenidas.
Juan Ramón Romero dijo que los primeros pobladores de Manzanares fueron pastores, caballeros y campesinos, y destacó la importancia de la agricultura. “Son los tres ingredientes esenciales para la formación de este pueblo tan importante a lo largo de los siglos XVI al XVIII”, afirmó.
Además explicó que el poblamiento de Manzanares se hizo desde los núcleos de población dispersos que ya existían, como el de Moratalaz, donde siguen en pie los restos de un torreón junto al camino de Daimiel, y el de Argamasilla de Pilas Bonas, que algunos historiadores sitúan en el molino de Santa Ana junto al Azuer, aunque Romero cree que sus restos se corresponden a un asentamiento romano. Por ello, el ponente cree que esa población de Argamasilla estaba en el cerro del Moro, junto al río, y donde hay cuevas vivienda habitadas hasta fechas cercanas.
En cuanto al origen de la villa dijo que fue peculiar “en cierto modo”, ya que responde a una forma de ocupación social del territorio a base de encomiendas que se repitió también en el cercano Campo de Montiel. “Manzanares es especial simplemente por su ubicación y por la función geopolítica que se le asignó dentro de la orden militar”, añadió en alusión a su posición fronteriza con la Orden de Santiago y a la existencia de pastos, tierra fértil en la vega del Azuer y agua.
Las certidumbres históricas que resaltó el historiador manzanareño fueron la delimitación de términos entre Santiago y Calatrava, de 1239; y la existencia del casco urbano en 1352, con el concejo definido. “En 1239 tenemos territorio, ubicación, y en 1352 tenemos ciudad. A partir de ahí son los mimbres sobre los que se va a construir el Manzanares que conocemos todos”, añadió.
La Doctora Almagro Vidal aportó los datos que se tienen sobre el proceso de formación de Manzanares y sobre cómo configuró su propio territorio dentro del contexto de la Orden de Calatrava. Y es que, el caso de Manzanares resulta interesante, según la historiadora, porque es una población que surgen en el Siglo XIII, pero sin término propio hasta dos siglos más tarde, algo que no corresponde con el proceso generalizado de formación de una villa en la Edad Media.
En cuanto a sus primeros habitantes, la historiadora dijo que los datos hacen pensar en que habría pastores, campesinos y algunos caballeros -ya que había una Encomienda de la Orden-, así como todo hace pensar que habría comerciantes que se aprovechaban de todo el flujo de personas que traía la ganadería trashumante, sobre todo a partir del Siglo XIV, explicó.