Desde el año 1996 ELCOGAS opera en Puertollano una Central térmica de Gasificación de Carbón Integrada en Ciclo Combinado (GICC) de 335 MWeiso, con la misión de demostrar la viabilidad técnico-económica de esta tecnología en la generación de energía eléctrica basada en combustibles fósiles. Para ello ha desarrollado y continúa desarrollando soluciones tecnológicas innovadoras, a través de la continua inversión en Proyectos de Investigación y Desarrollo que aporten procesos de producción más eficientes y más respetuosos con el Medio Ambiente.
Estos compromisos, recogidos en la Política de ELCOGAS desde su fundación, garantizan un comportamiento responsable de la empresa con el Desarrollo Sostenible y la protección del Medio Ambiente, evaluando los impactos ambientales de sus actividades, adoptando las medidas necesarias para prevenir la contaminación y fijando anualmente objetivos sobre los aspectos ambientales significativos.
En esta línea de mejora continua y conscientes de la importancia de preservar los recursos hídricos de Puertollano -imprescindibles tanto para el desarrollo económico y el progreso social de la comarca, como para salvaguardar su valioso ecosistema-, en el año 2004 ELCOGAS dio los primeros pasos para la modernización de sus instalaciones de tratamiento de aguas industriales, con la selección de un nuevo método de acondicionamiento de las aguas generadas en los procesos de producción y de limpieza del gas de carbón, que permitiera la posterior reutilización del agua tratada en otros usos internos de la Central, contribuyendo, de este modo, a un consumo sostenible del agua y a la regeneración ambiental del dominio público hidráulico de su entorno.
Estas consideraciones, junto con las novedades legislativas introducidas en el año 2009, en el que se otorga a ELCOGAS la Autorización Ambiental Integrada y en la que se definen nuevos límites de emisión de los parámetros característicos del vertido final mucho más restrictivos -en línea con las Directivas Europeas más actuales-, determinaron la decisión de la empresa de introducir el concepto de “vertido cero” en la selección de la tecnología. En esta línea se establecieron como objetivos no producir ningún nuevo vertido líquido y que se permitiera la recuperación del agua tratada con el propósito de reducir el consumo global de agua de la Central, respetando los compromisos adquiridos con las Administraciones Públicas concretados en nuestra Autorización Ambiental Integrada, anticipándose así, a futuros cambios legislativos.
En los estudios de viabilidad del proyecto se consideraron diferentes alternativas tecnológicas basadas en procesos de tratamientos físico-químicos y de electro-precipitación, pero la mayoría de ellos no cumplía con los objetivos establecidos en el proyecto debido a las limitaciones que presentaban por la calidad del agua a tratar. Finalmente se seleccionó la tecnología de “evaporación a vacío” como la solución más satisfactoria a los condicionantes del proyecto, que además de no suponer un consumo excesivo de energía, permitía recuperar el agua tratada, obteniéndose un concentrado sólido de reducido volumen. Además, existía ya experiencia demostrada en otras centrales similares a la de Puertollano, como en las de BUGGENUN (Holanda), TAMPA (USA) y WABASH (USA).
Proceso
En esencia, la evaporación a vacío consiste en separar la parte acuosa de la corriente líquida a tratar de las sustancias contaminantes que contiene, que pueden estar disueltas como sales o como sólidos en suspensión, obteniéndose un destilado de alta calidad acto para ser reutilizado en otros procesos de la Central, y un concentrado sólido que se puede comercializar. Adicionalmente la evaporación a vacío presenta otras ventajas con respecto a las demás alternativas tecnológicas consideradas en los estudios de viabilidad de este proyecto, entre las que destacan la no necesidad de emplear reactivos químicos en el proceso, su flexibilidad en cuanto al caudal de agua a tratar como en su calidad, el tamaño reducido y la robustez de los equipos, el alto grado de automatización que permite y la simplicidad de la operación con un coste de mantenimiento mínimo.
Con una inversión de 8 millones de euros, hoy en día el proyecto es una realidad consiguiéndose, tras su puesta en servicio en octubre de 2012, unos resultados excelentes en la calidad del agua tratada.
Para ELCOGAS es una gran satisfacción la culminación de este proyecto al ser conscientes de la gran importancia que tiene para Puertollano y su comarca, conservar y mimar un recurso tan escaso y valioso como es el agua de calidad, imprescindible para satisfacer las necesidades humanas y el desarrollo económico de la sociedad al ser una materia prima fundamental para la industria y la agricultura. Proyectos que permitan un adecuado tratamiento de las aguas residuales industriales para su posterior reutilización en las propias instalaciones contribuyen, sin duda, al consumo sostenible del agua y a la regeneración de los ecosistemas de nuestro entorno, y por tanto, deben ser considerados en la gestión global de los recursos hídricos.
La empresa ELCOGAS fue constituida en abril de 1992, para construir y operar la Planta de Gasificación Integrada en Ciclo Combinado, GICC, de Puertollano, como un proyecto de demostración a escala comercial, de las tecnologías limpias de uso del carbón. Desde sus primeras operaciones en 1996, la Central de ELCOGAS -la mayor del mundo en su tecnología-, ha demostrado un comportamiento medioambiental excelente, y una eficiencia superior a las centrales térmicas convencionales. Cumpliendo con su objetivo de mejora continua, participa en diversas investigaciones para buscar procesos de producción más eficientes, y soluciones tecnológicas innovadoras para la reducción del impacto ambiental. Buena prueba de ello es también, la Planta Piloto de Captura de CO2 y co-producción de Hidrógeno, la primera de escala industrial (14 Megawatios) en servicio en España y la primera a nivel mundial integrada en una central GICC dedicada a la producción de electricidad, que puso en marcha en octubre de 2010.
