Lorenzo sabe que sólo le vale la victoria; Márquez, que no sólo la victoria; Pedrosa sabe que sólo los errores de este dúo puede darle la llave del Campeonato. Así son las cosas, cuando faltan cinco carreras para finiquitar el Mundial 2013.
Tres eran tres…
El GP de San Marino, como hace quince días el de Gran Bretaña, ha arrojado el mismo podio final con Lorenzo en primera posición y las Honda secundándolo, con Márquez prevaleciendo sobre Pedrosa. A diferencia del “british”, donde el mallorquín resistió hasta la bandera a cuadros los emules del catalán de Cervera, en el circuito de Rímini, Jorge emprendió las de Villadiego nada más lanzarse la carrera y con un ritmo frenético desde la primera vuelta, se instaló en unos cómodos cuatro segundos que ya no cedió ni ante la tímida remontada de Márquez, que pifió todas sus esperanzas con dos errores al inicio de la carrera, ni ante la presión en la distancia de Pedrosa quien cada vez está más incómodo a lomos de una Honda inestable en las curvas medias. Así, este trío de valientes se jugará el título como se ha estado jugando el Campeonato en las trece pruebas disputadas, donde han estado los tres en el podio en siete ocasiones, y dos de ellos alternativamente en otras tres. 
Han vencido entre los tres en todas las carreras menos una (Rossi en Assen, rompió la regla), y de 39 escalones posibles estos tres tipos se han adueñado de 30, dejando en migajas (9) el botín de Rossi, Crutchlow y Bradl, los únicos privilegiados en acompañar a los tres españoles. Todos estos resultados propician que sean Márquez (253 puntos), Lorenzo y Pedrosa (219, cada uno) los únicos tres aspirantes al Mundial, ya que, aunque Rossi (169) y Crutchlow (146 puntos) están aún en la horquilla matemática (quedan 125 puntos de victorias en juego), sus posibilidades reales son casi nulas, de hecho, si Márquez evita las caídas y hace cinco segundas plazas en esta cinco pruebas, el Mundial lo coronará como el más joven campeón de la historia.
El enemigo se llama Jorge
Y se apellida Lorenzo, el campeón en título, bicampeón para más señas, el tipo que hace justo un año, para defenderse del acoso de Pedrosa, que encadenó cuatro victorias en esta últimas cinco carreras, ejerció una táctica tan fría como pragmática, consiguiendo cuatro segundas plazas consecutivas que le dieron el título antes del cierre en el GP de la Comunidad Valenciana, en Cheste. Este dato del pasado año, avala la teoría nada descabellada de que la regularidad de Márquez (es el único de los tres que siempre que ha terminado una carrera lo ha hecho en el podio) puede granjearle el éxito independientemente de las victorias de sus tremendos rivales, donde el “tapado” Pedrosa todavía no ha dicho su última palabra. Aragón, Malasia, Australia, Japón y Valencia conforman una gira bien conocida por todos los integrantes del “Gran Circo” de las motos, aunque, como en el caso de Márquez, no siempre a lomos de una MotoGP. Marc, para conseguir su título de Moto2 el pasado año, obtuvo dos victorias, un segundo y un tercer puesto en esta últimas cinco citas, por lo que su ataque final al Everest del motociclismo de competición se antoja cada vez menos hipotético, dada la recién adquirida madurez del piloto de Honda, que, para rematar, deberá convencer a su marca de la idoneidad de su candidatura por encima del, hasta ahora, eterno subcampeón, Pedrosa. Si este sutil asunto se trata como es debido, Lorenzo quedaría batido antes de lo que, su ahora eficaz Yamaha, se lo permita.
Y, como siempre, los demás
Tambores de guerra en las categorías menores donde los, hasta ahora inamovibles, líderes provisionales (Redding en Moto2 y Salom en Moto3) ven acosadas sus privilegiadas posiciones por los resultados del GP de San Marino. En Moto2, la victoria de Pol Espargaró, tras una serie de fiascos anteriores, y el discreto cuarto puesto de Scott Redding, reducen en 15 valiosos puntos la distancia en la tabla que es ahora de unos exiguos veintitrés a favor del británico; Nkagami con su segunda plaza evitó un triplete de podios en las tres categorías ya que, como suele ser habitual en Moto3, los nuestros barrieron a la concurrencia con Álex Rins por delante de Viñales y el benjamín de los Márquez, que precedía al líder de la provisional, Salom que, aunque conserva su dominadora posición, ve como se comprimen las diferencias en la tabla, justo cuando menos lo necesita. 
Salom (246 puntos), aventaja a Maverick Viñales en diecinueve, y al ganador en Misano, Rins en veintiuno; distancias casi milimétricas para cinco episodios que harán saltar chispas: próxima estación Motorland, Alcañiz… Teruel también existe.
Juanma Núñez
