El hombre de 23 años detenido en Terrassa (Barcelona) por los Mossos d’Esquadra por presuntamente causar heridas de segundo y tercer grado a una niña de cuatro años de Ciudad Real a la que cuidaba ha sido puesto en libertad con cargos acusado de un delito de lesiones.
Además, según ha informado Radio Castilla-La Mancha, el Juzgado de Instrucción de Tarrasa que lleva el caso ha decretado para el presunto maltratador, que está casado con la madrina de la menor, una orden de alojamiento de 1.000 metros con la víctima.
La detención de este hombre, de nacionalidad mexicana, se produjo en tierras catalanas porque la pequeña pasaba en Tarrasa un mes de vacaciones junto a sus familiares, tal y como publicó este fin de semana el diario El País.
Al parecer, el detenido castigaba a la pequeña introduciéndola en una bañera de agua hirviendo cuando se portaba mal. Hechos que sucedieron hasta tres veces con el consentimiento de su mujer, que también ha sido imputada.
El padre de la niña fue quien denunció el suceso a los Mossos, tras comprobar que las versiones de los cuidadores y los de la niña diferían sustanciamente, cuando acudió a la Unidad de Cuidados Intensivos el Hospital Vall d’Hebron, donde la menor sigue ingresada desde el pasado 19 de agosto con quemaduras en piernas y pies.
No entiendo la sentencia dada la gravedad del hecho denunciado.
No es «sentencia» es «auto» (corríjanme los letrados). Queda pendiente de la instrucción y de -casi seguro- la apertura del juicio oral, su celebración y ya sí, la sentencia.
En teoría -apelo a los letrados igualmente-, se habrá acordado la libertad provisional (por auto) por alguno o varios de los siguientes motivos:
– Porque el hecho no haya provocado alarma social (eso depende del sitio. Quizá en Tarrassa no lo haya hecho-)
– Porque no exista peligro de fuga (depende, de si tiene familia y trabajo en la zona)
– Porque no existan indicios de veracidad en la denuncia o existan versiones contradictorias, ambas con «buena pinta».
Ya digo, me someto a los letrados que caminen por este foro romano, pero en cualqquier caso, ojalá hubiera sido un accidente doméstico. Cuesta trabajo pensar que exista gente capaz de tanta maldad.
Saludos, Luis Mario.