Daimiel Noticias.- El alcalde de Daimiel impondrá a la asociación cultural encargada de haber instaurado, consolidado y potenciado el Belén Viviente la Medalla de Honor ‘Ciudad de Daimiel’ 2013 que se otorga a aquellas organizaciones, entidades y particulares que destacan por su contribución a la sociedad del municipio. Se trata de un «justo» reconocimiento a sus 26 años dedicados a la Navidad daimieleña.
La Feria y Fiestas de Daimiel 2013 tendrán una connotación navideña. La que proporciona los elegidos en la presente edición como Medalla de Honor ‘Ciudad de Daimiel’. Se trata de la docena de integrantes que componen la asociación cultural Pastores de Belén, en quienes ha recaído esta distinción que se concede desde el Ayuntamiento de Daimiel a personas, asociaciones e instituciones que destacan por su contribución a cualquier aspecto cultural, empresarial o social relacionado con la localidad. En principio, los cinco primeros que subirán al escenario pertenecen a la Junta Directiva con su presidente Francisco Terriza a la cabeza.
Ellos, aún con la emoción, reconocen estar «satisfechos» por este reconocimiento que les llega después de haber emprendido hace ya 26 años el montaje, consolidación y mejora del Portal de Belén Viviente, paso casi obligado cada Navidad y que abre sus puertas en el Parterre Municipal, junto a la iglesia de Santa María La Mayor.
Este espacio navideño se ha ido dotando de mayor contenido poco a poco. Un hecho que ha supuesto una constante dedicación y trabajo invisible para llegar a finales de año con una preparación que diera gusto a todos los públicos, pero especialmente al infantil. El levantamiento y localización de las casetas, la búsqueda de sus burros, corderos, el sonido ambiente de villancicos… son algunos de los aspectos en los que la asociación se afanaba con especial ímpetu. Ese esfuerzo ha sido considerado para otorgar la Medalla de Honor Ciudad de Daimiel, una distinción que lleva aparejado además el pregón inaugural de la Feria y Fiestas 2013.
Apenas unos clavos y tablas sirvieron como punto de partida para un proyecto que ha ido evolucionando con el paso del tiempo. Así lo explicaba Francisco Terriza, presidente de la asociación, quien añadía que cuando se empezó con Miguel Moreno, ideólogo y fundador de esta empresa, «sólo disponíamos de clavos, carrizo y leña de la sierra; poco a poco lo fuimos modernizando e intentando incorporar algo nuevo al Belén».
El origen de la asociación que será ensalzada el 23 de agosto hay que buscarlo en otra agrupación, «Los amigos del arte», con claros mimbres carnavaleros y culturales. Uno de sus principales, Miguel Moreno, quiso darle un mayor protagonismo a la Navidad daimileña. Así fue como se dio puso en marcha uno de los primeros belenes vivientes de la provincia que ha requerido edición tras edición anteponer su actividad a la vida personal de los integrantes de esta asociación, como explicaba Fermín Álvarez. «En muchas ocasiones anteponíamos el belén a la familia que siempre nos tenían que estar esperando para cenar», reconoció.
Y así han ido pasando las dos décadas y un lustro de historia, convirtiéndose la iniciativa en un imprescindible en las fiestas de Daimiel con las que se despide el año. Sin embargo, asegura Terriza, «ya son muchos años para estos pastores y empiezan a notarse.»
Con muchas anécdotas vividas y algunos sinsabores, pero sin perder la emoción, estos pastores han formado parte de la Navidad de muchos daimieleños en los últimos 26 años. A partir de ahora, es el momento de ceder el testigo, y vivirlo con la dualidad que da la distancia y la añoranza a los sentimientos de haber creado un proyecto que ya es toda una institución en Daimiel y que pasa a manos de su Ayuntamiento, y por tanto, de sus ciudadanos.