El encendido de una antorcha, como símbolo de unión entre pueblos y culturas, anunciaba el inicio del XXXI Festival Internacional de Folclore y del XXXIV Festival Nacional de la Seguidilla. La Asociación de Coros y Danzas Mazantini, con el patrocinio del Ayuntamiento de Ciudad Real, ha cambiado la dinámica de la presente edición concentrando en un único día ambos eventos.
La alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, daba la bienvenida a los participantes y reconocía sentirse contenta al ver cómo la capital vuelve a acoger un festival de reconocido prestigio. La primer edil afirmaba que ‘el folclore es el lenguaje que une a los pueblos, riqueza de nuestro patrimonio cultural, hablar de folclore es hablar de historia y de tradiciones’. Romero felicitaba a los anfitriones, al Grupo Mazantini, por la ‘ilusión, el cariño y el trabajo que ponen para organizar este evento, muestra palpable del amor que profesan a la ciudad y nuestras raíces’.
Por su parte, la vicepresidenta del Grupo Mazantini, Ascensión Segura, agradecía al Ayuntamiento Capitalino su colaboración y en especial el empeño que ha puesto la Alcaldesa para que este año hubiera un Festival de Folclore y de la Seguidilla de primer nivel; ‘Chon’ reconocía que ‘sacar adelante esta edición ha sido un verdadero reto y a la vez, una experiencia positiva, que les ha permitido aportar lo mejor de cada uno de los integrantes’.
África, América y Europa, tres continentes unidos por la música y la cultura. Miembros de los grupos participantes: Ballet Jammu (Senegal), Nativos de Macondo (Colombia), Coros y Danzas de Murcia, Casa de Extremadura de Leganés, y el Grupo Mazantini, fueron portando la antorcha en un vistoso pasacalles que finalizó en el Auditorio Municipal la Granja.
Fotos: Eusebio García del Castillo Jerez
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Me parece muy bien y estoy totalmente a favor de la interculturalidad y por supuesto a favor de los hermanamientos entre los pueblos; por ello el encuentro de hace dias en la Pl Mayor de Entreculturas hay que apoyarlo y este, del festival internacional del folclore, aunque más institucional, también hay que apoyarlo – en principio – y digo en principio porque ahora viene «el pero».
Y «el pero» es que mientras por un lado queda muy bien todo este apoyo institucional a las asociaciones, por otro, ahí están las cada vez más mermadas ayudas en solidaridad internacional a las ONGs que trabajan en ellas. El famoso 0,7% está muy lejos de ser realidad en muchas partidas y las ONGs se quejan y con razón de que cada vez – con la falsa excusa de la crisis – hay menos ayuda para realizar sus humanitarias y sociales funciones.
La ayuda española a la cooperación es cada vez menor y vemos como muchos activistas que están en zonas conflictivas en todos los sentidos, tienen que volver a España pues ni pueden atender a quienes lo necesitan ni tienen seguridad en sus vidas.
Así que repito y termino. Muy bien todas estas manifestaciones multiculturales e interraciales, pero si no van acompañadas de una ayuda efectiva solo quedarán en eso: una foto para el recuerdo…