Multimedia.- El pueblo de Herencia demostró su gran cariño al maestro Hermógenes Rodríguez en la jornada celebrada con motivo del 30 aniversario de su fallecimiento, que organizó el Taller de Historia Local de la Universidad Popular herenciana.
Más de 120 personas se acercaron a la Biblioteca Municipal, entre ellos su sobrino Enrique Esbrí y el alcalde Jesús Fernández Almoguera, a testimoniar su reconocimiento a la memoria de Hermógenes Rodríguez (el cual falleció el 17 de marzo de 1983), que da nombre al Instituto de Secundaria de la localidad y una de las figuras más importantes de la historia reciente de Herencia, quien, con su labor, ejemplo y tesón, contribuyó a formar a multitud de generaciones de herencianos, siendo un referente para todos los maestros y profesores posteriores de la localidad.
En las jornadas del Taller de Historia Local, que se han denominado “Don Hermógenes, la Herencia de un maestro”, tuvo lugar una charla-coloquio en la cual fueron desgranando sus recuerdos del maestro Manuel Jesús López- Sepúlveda, alumno y profesor con Hermógenes Rodríguez; Francisca García Alcañiz, alumna y profesora con el mismo y miembro del Taller de Historia Local, y Jesús Gómez-Calcerrada, alumno y colaborador del homenajeado.
Lola Fernández, concejal de Cultura, abrió el acto, junto a Enrique Esbrí, sobrino del maestro fallecido, y al licenciado en Historia y profesor del Taller de Historia Local, Claro Manuel Fernández-Caballero, coordinador de la charla..
Exposición “La Escuela de D. Hermógenes” del 17 al 29 de marzo
Al mismo tiempo, se inauguraró la exposición “La Escuela de don Hermógenes”, que podrá visitarse hasta el 29 de marzo en la planta superior de la Biblioteca Municipal “Miguel de Cervantes”, en horario de mañana de 10 a 14 horas; y de tarde, de 17 a 20 horas. “Esta exposición recoge un importante número de fotografías cedidas por el I.E.S. “Hermógenes Rodríguez” que reproducen la situación de las escuelas y del sistema educativo imperante en la Herencia de mediados del siglo pasado. Junto a estas hay gran número de material bibliográfico de la época facilitado principalmente por los componentes del Taller de Historia Local. Además también se cuenta con diferente mobiliario (alguno incluso personal del propio Hermógenes Rodríguez) con el que se reproduce el espacio en el cual nuestros padres y abuelos recibían clase”, explica Claro Fernández-Caballero
En estas jornadas colaboran cediendo material, además del aportado por los propios integrantes del Taller de historia local, otras instituciones como el IES “Hermógenes Rodríguez”, el Centro de Estudios Herencianos, la agrupación socialista de Herencia y el Seminario Menor Mercedario de Herencia.
Hermógenes Rodríguez tiene dedicado una calle y da nombre al instituto de secundaria de la localidad y a la AMPA del Colegio público
Como recoge el libro sobre las calles de Herencia, realizado por el Taller de Historia Local en el 2011, Hermógenes Rodríguez nació en Génave (Jaén) un 12 de diciembre de 1911.
Como nos cuenta en un artículo Claro Fernández-Caballero, que también figura en el blog www.historiadeherencia.wordpress.com , es a partir de julio de 1946 cuando empieza la relación de Hermógenes Rodríguez con Herencia, a donde llega en busca de su padre, Juan Rodríguez Armijo, que ya trabajaba como secretario del ayuntamiento. Desterrado de su Jaén natal, atrás dejaba un pasado en el cual perteneció a las FUE (Federación Universitaria Española, formada por estudiantes universitarios de tendencia republicana), a las Juventudes Socialistas y al Partido Comunista, llegando incluso a ser comisario político durante la II República, motivos por los cuales, al acabar la contienda civil sería hecho preso y condenado, siendo salvado de ser fusilado en último momento gracias a la intervención de unas monjas que constataron su valía y su calidad humana.
Nos dice Claro Fernández-Caballero, como expedientado, y no pudiendo ejercer su profesión como maestro nacional, para lo que había estudiado, empezó a dar clases particulares en Herencia, y casi sin darse cuenta, al poco tiempo se encontró con un numeroso grupo de chicos que necesitaban ayuda. Como en realidad no tenía ningún compromiso formal de otra índole, y pensando en la obligación moral que tenía, cuando llegó el mes de octubre formalizó una modesta clase, sin apenas material, en la calle de las Cruces. Fue este el inicio de uno de los hitos más importantes del mundo cultural y educativo de Herencia.
La legalización de un centro de enseñanza no estatal era bastante complicada en la época. Sin embargo, finalmente consiguió su legalización gracias sobre todo a la intervención de Joaquín Gómez Montalbán, párroco de la población y Gabriel López-Sepúlveda. Su fama, prestigio, y dotes pedagógicas, así como las condiciones económicas que ofrecía permitió que la Academia de San Agustín, que así se llamaba el centro educativo que Hermógenes Rodríguez llegó a fundar en lo que hoy son algunas de las dependencias del Ayuntamiento de Herencia, llegara a tener más de 200 alumnos y hasta siete aulas con otros tantos maestros.
La gran mayoría de sus alumnos, donde había tanto chicos como chicas y que abarcaban desde la enseñanza primaria hasta los de preparación para carrera especiales, procedía de familias humildes debido a las condiciones económicas que ofrecía, con precios bastante módicos. Además, también atendía a un numeroso grupo de alumnos que iban a la escuela por la noche, después de volver del trabajo, la mayoría del campo, trabajando de esta forma de doce a catorce horas diarias.
Su rehabilitación profesional llegó en 1974 pudiendo así comenzar su actividad en el Colegio Nacional Mixto “El Parque”, en el edificio “Redondo” donde trabajaría hasta su jubilación definitiva.