El consejero de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno autonómico, Marcial Marín, ha informado hoy de que el Ejecutivo castellano-manchego pondrá en marcha para el próximo curso 2013/2014 tres nuevas aulas hospitalarias en Ciudad Real, Cuenca y Toledo. “Esta actuación garantiza a los niños hospitalizados el derecho a la educación y complementa así un servicio que ya se presta en otros dos hospitales de nuestra región, situados en Guadalajara y Albacete”, ha explicado Marín.
El consejero ha informado de la toma en conocimiento por parte del Consejo de Gobierno del proyecto de Decreto que regula la atención especializada y la orientación educativa y profesional del alumnado en la comunidad de Castilla-La Mancha.
Marcial Marín ha asegurado que “se trata de dar respuesta a todo el alumnado castellano-manchego”. No obstante, “se centra especialmente en aquel alumnado con necesidades especiales”, ha añadido el consejero. Según recoge el decreto, para la escolarización del alumnado con necesidades especiales se prioriza la búsqueda de la normalización en el acceso, la permanencia y la inclusión en el sistema educativo en todas las modalidades, ya sea en centros ordinarios, centros de educación especial o aulas especializadas en centros ordinarios.
En este sentido, Marín ha recordado la implantación de las siete aulas para niños con trastorno del espectro autista (TEA) que el Gobierno de Castilla-La Marcha ha implantado de manera novedosa durante este curso académico en nuestra región. Asimismo, el consejero ha hecho hincapié en que es un “proyecto complementario y voluntario, en el que todos aquellos padres que lo deseen podrán elegir las aulas TEA para sus hijos, o acudir a los centros ordinarios como lo venían haciendo hasta ahora”.
Además, el titular de Educación ha destacado que el “Gobierno autonómico velará para que la escolarización del alumnado con necesidad específica esté cubierta con las máximas garantías, favoreciendo la cohesión social y garantizando los principios de equidad y calidad educativa”
Mejorar la función del orientador
Con esta iniciativa, “también se va a mejorar la función del orientador educativo, para que asesore y facilite al alumno que curse enseñanzas en todas las etapas educativas, de manera especial a los de formación profesional o a los que deseen incorporarse al mercado laboral, informándoles del conjunto de ofertas y posibilidades que los alumnos tienen a su alcance”, ha expuesto Marín.
El consejero de Educación ha destacado que el objetivo principal de estas acciones es promover, en las mejores condiciones, “la transición desde el sistema educativo al mundo laboral, así como la inserción en el mundo laboral de los alumnos de los centros de educación de personas adultas”. Para ello, se van a diseñar y desarrollar programas de orientación profesional y de inserción concretos.
En este sentido, Marín ha destacado el papel que cumplen los orientadores como guías en el futuro académico y profesional de los alumnos. ¨Una adecuada orientación es fundamental para prevenir posibles fracasos en la elección de los estudios o salida laboral; de ahí la importancia de desarrollar planes específicos de orientación para facilitar al alumno, en función de sus capacidades e intereses, la toma de decisiones responsables sobre su futuro académico y profesional”, ha subrayado el titular de Educación.
“En línea con el Plan de Acción para el Empleo Juvenil, esta actuación previene las altas tasas de desempleo desde la formación educativa”, ha advertido Marín.