EL PSOE exhibe las obras del Teatro Auditorio de Ciudad Real y los 14 millones que costaron como «el folleto electoral más caro de la historia»

El Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Ciudad Real, volvía hoy a arremeter contra las inacabadas obras del Teatro Auditorio de la capital, y para ello se ha llevado a los periodistas a pie de obra. A juicio de la concejal Pilar Zamora, se trata del «folleto electoral más caro de la historia de la ciudad» porque “nunca fue un proyecto cultural, nunca se pensó en qué actividad cultural albergaría. Primero se pensó en el edificio, que era lo que se veía y lo que vendía en aquel momento, previo a la campaña electoral municipal”.

Zamora califica el proyecto como el «sueño faraónico y desproporcionado de un mal gestor», en alusión al anterior alcalde de la ciudad, Francisco Gil Ortega, y lo puso como ejemplo “de la nefasta gestión y del desinterés” de la alcaldesa Rosa Romero. “Con este Teatro Auditorio hemos pasado del sueño a la pesadilla”, dijo.

Zamora se detuvo en las cifras, que desglosó con detenimiento, recordando que “la historia interminable” del Teatro Auditorio comienza en enero de 2006 cuando se publica el pliego del concurso. Se preveía la construcción de un edificio de 7.000 metros cuadrados, más otros 7.000 de aparcamientos, con un presupuesto de ejecución material de 10 millones de euros. Resuelto el concurso, se elabora el proyecto de obras que se desarrolla con un presupuesto de contrata de 20 millones de euros. En 2007 se adjudica el proyecto a la empresa Vías y Construcciones por 17,6 millones de euros.

«Al poco tiempo de iniciada la obra y a pesar de que se debían haber realizado estudios geotécnicos del terreno, aparecieron graves problemas en la cimentación, lo que llevó a hacer una modificación en el proyecto con un coste de más de dos millones de euros. Es decir el proyecto de contrata aumenta de 17 a 19 millones de euros», relata el PSOE.

Continuaba Zamora calificando de «sorprendentes» las previsiones del desarrollo del proyecto que hizo el equipo de gobierno, «dado que ya en octubre de 2006 redactaron un documento en el que se refleja que las obras podían alcanzar los 28 millones de euros (más de cuatro mil seiscientos millones de pesetas)». La concejala socialista consideró cifras «desorbitadas» los diecisiete millones del presupuesto de contrata (después 19), el más de un millón y medio de euros de los honorarios del proyecto y la dirección de obras y los más de siete millones en equipamiento escénico. “Solamente con el importe del equipamiento escénico se han realizado teatros completos en nuestra provincia y en nuestra región. Miren ustedes el paraninfo de nuestra Universidad costó en total dos millones y medio de euros. Desde el punto de vista económico la gestión de las obras ha sido desastrosa”, dice.

La edil también recordó que para pagar estas obras el Ayuntamiento, “con un equipo del PP que sacó pecho e hizo de la obra un asunto personal, no buscó la ayuda de nadie ni solicitaron a nadie que les echase una mano. Iban a sacar el dinero vendiendo parcelas municipales por importe de veinte millones de euros. Es decir, suelo de todos para cumplir el sueño de algunos”.

Y siguiendo con el relato cronológico, Pilar Zamora llamaba la atención sobre el hecho de que a pesar de tener el dinero, «en 2010 Romero y su equipo de gobierno deciden parar las obras, quizás se dan cuenta de que se les ha ido de las manos y resuelven el contrato de ejecución de obra con Vías y Construcciones SA. Cuando se paralizan las obras se han invertido ya más de catorce millones de euros».

Tras esto, se preguntaba «qué es lo que tiene la ciudad», señalando a su espalda el armazón: “un aparcamiento que no sirve de nada dadas las condiciones de construcción del mismo y la escasa o nula demanda de la zona si no funciona el auditorio, una plaza que se ha inundado y se ha tenido que levantar entera, una estructura deteriorada que día a día va perdiendo valor y cuya utilización se hará muy difícil cuando se puedan reiniciar las obras».

No quiso dejar pasar por alto los algo más de cinco millones de euros  presupuestados que quedarían para terminar la obra, preguntando «dónde están y si serían suficientes, cuestión improbable si se tiene en cuenta la situación en la que están las obras, que habría que sacarla nuevamente a concurso y que la empresa que se adjudicara las obras no podría continuar desde el punto en el que está actualmente sino que tendría que empezar por evaluar el estado en que se encuentra lo ya realizado».

Por eso, calcula el Grupo Socialista, de acuerdo con los datos del proyecto inicial, la ejecución de lo planificado por el Ayuntamiento ascendería a 31,5 millones de euros a día de hoy. “Si tenemos en cuenta que la partida de inversiones de este ayuntamiento para el 2013 es cero euros, que el Plan de Ajuste nos impide endeudarnos hasta el 2022 y que Rosa Romero y su equipo ni saben ni quieren gestionar, el Auditorio es un problema para los vecinos y vecinas de la Ciudad”.

Pilar Zamora llevaba a ejemplos prácticos lo que supondría terminar el Teatro Auditorio: “para terminarlo tal y como lo concibieron unos cuantos soñadores, tendríamos que cerrar el Ayuntamiento. Su coste de terminación supondría dedicar todos los impuestos y tasas a su construcción. El coste de finalización supera el presupuesto de todas nuestras Concejalías”.

Por último, los socialistas consideran que “este montón de cemento no puede formar parte del paisaje de una ciudad que enamora” y piden que aquellos que han sido responsables de este desastre den respuestas de inmediato.