La decisión de Benedicto XVI, renunciando al Papado romano abre nuevas dimensiones del perfil de la jerarquía eclesiástica, y particularmente de la jerarquía católica. Entre otras dimensiones visibles, la de la autonomía de las decisiones humanas, frente a los designios divinos.
Si para sectores ultras y ortodoxos, como el Opus Dei, se hablaba del valor divino de lo humano; ahora habrá que aceptar la autonomía del valor de las decisiones humanas, frente a los designios del Colegio Cardenalicio; incluso frente a los designios emanados del Espíritu Santo.
La firmeza de la roca fundacional, aparece revestida por ello, de la debilidad arenosa de la piedra fatigada por la erosión. Una erosión practicada por algo tan humano como el tiempo y el viento. Un viento que acaba desgastando todo. Hasta las ideas y los preceptos sagrados.
delicatessen
Será el nuevo Papa una mujer? No. Será el nuevo Papa padre de familia? No. Será el nuevo Papa homosexual declarado? No. Será el nuevo Papa orihundo de Asia, América Latina o África? No. Irá el nuevo Papa en la línea de la sociedad y acercará posturas con quienes demandan una Jerarquía católica más humana y menos divina? No.
Me interesa, por tanto, quién será el nuevo Papa?: NO.
De cualquier manera. Sr Rivero: Gracias por el texto. Im-prezionante…como siempre.
Un nuevo Papa casado con un cardenal (divorciado éste de una monja anterior) de quien también se divorcia para cambiarse de sexo, haciendo homilias sobre la humanidad del aborto y contra la becerrez del matrimonio pa toa la vida.Aunque parezca increible hay gente que con un Papa asi se convertira.