Ecologistas en Acción Ciudad Real ha presentado ante la Concejalía de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Socuéllamos alegaciones al borrador del Plan de Ordenación Municipal (POM), dentro de las fases de consultas que precederán a su definición y aprobación. La memoria justificativa no admite dudas, según la organización: «falta una mayor concreción en el control y alejamiento de actividades calificadas por la legislación de insalubres, molestas, nocivas y peligrosas», por lo que pide la retirada del POM.
Según la organización, el POM incumple el Artículo 2 del Reglamento de Planeamiento Urbanístico de Castilla–La Mancha que ordena “la localización y distancia a otros usos de aquellos establecimientos donde se producen, utilizan, manipulen y almacenen substancias insalubres, nocivas y peligrosas”. También ignora el Decreto 2414/1961, más conocido como Reglamento de Actividades Molestas, Insalubres, Nocivas y Peligrosas (RAMINP) aún aplicable a la Comunidad de Castilla–La Mancha.
«Es decir, el Ayuntamiento de Socuéllamos permite que éste esencial instrumento de planificación urbanística se desentienda de la ubicación de centros, instalaciones y tecnologías que conllevan riesgo de contaminación ambiental y peligro evidente para la población, como gasolineras, talleres de automoción, o antenas de telefonía móvil.Tampoco introduce mecanismos de revisión de licencias municipales para estas actividades radicadas en el casco urbano que, con carácter retroactivo, permitan su adaptación a las ordenanzas municipales y a la legislación ambiental», subrayan los ecologistas.
Para la organización, «el diseño de las políticas de planeamiento urbano sigue siendo coto vedado de los equipos de gobierno y de las empresas consultoras adjudicatarias, que imponen modelos de ciudad continuistas, que no afrontan la renovación, desplazamiento o eliminación de las fuentes emisoras de contaminación, y que son contrapuestos a criterios de sostenibilidad. Se da, además, la circunstancia de que su tramitación suele presentar un perfil todavía bajo en el cumplimiento de procedimientos democráticos que favorezcan la participación ciudadana, lesionando la seguridad jurídica de las partes alegantes».
Ecologistas pide la retirada del proyecto de POM de Socuéllamos y el reinicio de su tramitación, «al fin de adecuarlo a las disposiciones legales, a las necesidades funcionales de la población (y no sólo al de determinados grupos de interés) y con el debido control social».
