Casi una decena de empresarios del ramo están detrás en un proyecto que podría ver la luz a primeros de 2013. Pretende aumentar los niveles de formación de los profesionales, la calidad en el servicio y favorecer la regularización de negocios hasta la fecha clandestinos.
Daimiel Noticias.- Casi una decena de empresarios del sector de la peluquería y estética están forjando un proyecto encaminado a la creación de una asociación que de entidad a este ramo de profesionales. La idea está liderada por Remigio Trujillo y avalada por AEDA (Asociación de Empresarios de Daimiel y su comarca), como confirmó su portavoz, Lorenzo García Muñoz. Un respaldo que es compatible con el funcionamiento autónomo de esta nueva agrupación cuya cobertura estimada podría alcanzar los 40 asociados.
Entre los fines prioritarios se encuentran los de canalizar la formación de estos profesionales, aumentar los niveles de calidad en el servicio al cliente, y, sobre todo, «anular el nivel de intrusismo y economía sumergida del sector con centros clandestinos». Según Trujillo, «el objetivo pasa porque todos juguemos con las mismas cartas, que se regularice la situación, que todo el mundo esté de alta y pague sus seguros y no haya una competencia desleal». Y es que se todo esto «se agrava en época de crisis», agregó García Muñoz.
En este sentido, ambos apuntaron que «los consumidores deben acudir a peluquerías y salas de estética que ejercen la actividad de forma legal para evitarse igualmente problemas que pudieran surgir en el ámbito sanitario».
Por todos estos motivos, tampoco se descarta informar ante la administración pertinente de la situación de «clandestinidad» de los negocios que no estén dados de alta y que funcionen de forma fraudulenta.
En las próximas semanas se irá concretando estatutos, cuota, presupuesto y funcionamiento de la asociación incipiente, y el papel matriz de AEDA en ella, además de captar socios. Está previsto que empiece a estar operativa a principios de 2013 y su sede sería la misma que la de la principal. Lorenzo García Muñoz destacó que «en este tipo de asociacionismo los beneficiados son todos, y muy especialmente la clientela».
