Fátima Serrano Borge. Portavoz del Grupo Municipal socialista del Ayuntamiento de Ciudad Real.- No es la primera vez que hablamos del Pleno Municipal del Ayuntamiento de Ciudad Real. Estas líneas carecerían de importancia si, tal y conforme viene pidiendo el GMS en incontables ocasiones, los plenos se realizaran por las tardes en horario no laboral o, por el contrario, y aprovechando ese ente publicitario del equipo del gobierno que es la tele municipal, se retransmitieran o si se colgaran en la web del ayuntamiento, como sucede en muchos ayuntamientos y para ejemplo, Valdepeñas.
En ese caso no haría falta que les contara lo que sucedió en el pasado Pleno celebrado el viernes, en el que en algunas cuestiones se rebasó el límite de la sinrazón; lo conocerían de primera mano y tendrían su propia opinión sobre el tema.
Como no es así, les diré que entra dentro de lo habitual que a todas las mociones y propuestas de la oposición, el equipo de Rosa Romero, diga no. Que entra dentro de lo normal que se nos conteste saliendo «por los cerros de Úbeda» y echando balones fuera , quitándose de encima la argumentación por la vía de apremio. Que entra dentro de lo lamentable que siempre se escuden en no sé qué herencia , como si fueran otros y no ellos, los del PP, quienes llevaran gobernando en la ciudad casi una veintena de años y que suele ser frecuente escuchar como a los concejales socialistas nos tildan de «comisarios políticos» o similar porque defendemos , entre otras cosas, el buen hacer de la Diputación para con todos los ayuntamientos y por supuesto para con el de Ciudad Real , ya que es la única administración de la que ha recibido los únicos ingresos ,hasta el momento. Sin embargo en esta ocasión resultó bochornosa la actuación de algunos compañeros de corporación.
Era pleno de subida de tasas y nuestro grupo había presentado numerosas enmiendas dirigidas a amortiguar en lo posible el impacto que tendrán sobre las familias más desfavorecidas. ¿Acaso creen que consideraron la posibilidad de admitir alguna de ellas? ¿Todas eran inviables? ¡Ni mucho menos! Algunas, de hecho, están en vigor en algunos municipios incluso gobernados por el PP, pero aquí el Sr. Concejal de hacienda las tumbó una a una, ¡faltaría más! ¡para algo son mayoría!
Luego empezaron las propuestas de la oposición. El GMS presentó una moción muy concreta para arreglar algunos aspectos inaplazables en el barrio de los Ángeles. Alguno, incluso, que puede generar problemas graves e inmediatos en las instalaciones deportivas. Sin contemplaciones, no
Presentamos también una moción solicitando un Plan de Servicios Sociales para que se analizara la situación del momento actual y se diseñaran los elementos que lo determinan. De esta manera se podría dar una respuesta global a toda la problemática existente, como por ejemplo en la barriada de San Martín de Porres. Pedíamos que fuese confeccionado por los agentes sociales propios del ayuntamiento en colaboración con asociaciones y otras entidades, para que de esta manera supusiera el menor gasto posible, pero ¡qué tontería! vino a decir la Sra. Messía de la Cerda, ¡con lo bien que está todo! ¡Qué necedades dicen! No
Presentamos un manifiesto de apoyo a la erradicación de la pobreza. ¡Un manifiesto que contaba con el apoyo de todas las organizaciones que conforman la Alianza Local contra la pobreza (Caritas, Manos Unidas, Solman… y diecisiete organizaciones más! ¡Y votaron NO! ¿Es posible tener más equivocado el norte? En esta ocasión la Sra. Messía traspasó la línea del sentido común, porque su voto en contra solo denota desprecio, arrogancia y una cortedad de miras digna de hacérsela mirar.
Pero es que, después, solicitamos que se elaborara un Plan de Igualdad para los trabajadores del ayuntamiento que es obligatorio por ley hacer y vuelven a decir que sí, que es verdad que es obligatorio pero que votan NO. Que es como decir que hay obligación de hacer la Declaración de la Renta pero que yo no la hago porque soy así de listo. En este caso la Sra. Gómez Castrillón, tampoco estuvo muy fina que digamos
Por último y, aunque no en el mismo orden, solicitábamos que el ayuntamiento reclamara a la Junta los 4.776.705,2 euros que les deben. Legítima reclamación que lógicamente ha condicionado la inexistencia de determinados servicios que de este dinero se nutrían. Léase plazas de comedores escolares, ayudas para becas, libros de texto, etc. En un pleno en el que el punto estrella había sido la aprobación de tasas que iban a afectar gravemente al bolsillo ya disminuido del ciudadano y en el que se nos hablaba de que hacerlo así era “impepinable” por la ley de Estabilidad presupuestaria, cualquier ciudadano sin conocimientos contables llegaría a la conclusión de que si esos cuatro millones y pico de euros hubieran estado en las arcas municipales, un agujerito menos del cinturón nos habríamos tenido que apretar ¿o no? Máxime cuando además presentaban otros pocos expedientes de ampliación de crédito… por aquello de lo boyantes que estamos y lo bien que presupuestamos.
Pero saben ustedes lo que pasa, pues que aquí es donde más se les ve el plumero, porque no se puede contemplar ni como hipótesis que muevan un dedo para incomodar a la Sra. Cospedal. ¡Por Dios! ¡Con la de cosas que tiene ella en que pensar, para venir a molestarla! Que no nos manda el dinero, ¡pues ya lo mandará la pobre cuando tenga! Mientras tanto que vayan pagando los españolitos ciudadrealeños o que prescindan de prestaciones, que a eso ellos lo llaman arrimar el hombro cuando deberían llamarlo arrimar y vaciar el bolsillo. Pero además es que se les ve por encima del pelo que lo que realmente quieren es evitar a toda costa significarse no vaya a ser que se vean truncadas sus aspiraciones. Porque hasta ahora Ciudad Real ha sido un buen trampolín, Toledo está a la vuelta de la esquina y Madrid ¡está tan cerca…!