Unas jornadas que han atraído a vecinos y a foráneos y que han dado al municipio un fin de semana difícil de superar.
La jornada del domingo, comenzó con una misa solemne medieval, que dio comienzo a las 12 del mediodía en la iglesia de la Asunción. Un templo, en el que ya hace ochocientos años, se celebró este tipo de ceremonias. Las palabras en castellano y en latín del párroco del templo, D. Luis Gallego y el coro de Cámara Mansil Nahar, dieron a la liturgia el empaque perfecto para trasladar a los feligreses mentalmente al siglo XIII. La sobriedad y belleza de la liturgia, conjugó a la perfección como ceremonia central correspondiente a una orden religiosa como fue Calatrava ocho siglos atrás. Durante el ofertorio, se bendijeron numerosos frutos de la tierra, que posteriormente fueron sorteados en la celebración de la comida popular en el Parterre del Río.
Al finalizar la ceremonia, de nuevo los bailes de salón hicieron gala de sus danzas medievales en la Plaza de la Constitución, despidiendo a la comitiva que se encaminó hasta la Plaza del Castillo, lugar, donde fueron recibidos también con bailes y danzas de la época.
Llegó el momento central de las Jornadas Medievales, el sorteo de alcaldes elegidos por la nobleza y por el pueblo. El representante elegido por los primeros fue Manuel Serrano Amo, la suerte del segundo recayó en Manuel Lorente Roldán. Ambos representarán por un año al pueblo en las actividades que les sean marcadas. Ambos representantes de la nobleza y del pueblo, puntualizaron la importancia de estas fiestas para Manzanares por el éxito y el atractivo para visitantes de otras localidades durante estos días. Asimismo, Lorente Roldán, recordó las palabras pronunciadas por el Primer edil manzanareño el viernes, por las que informaba de que la ley marca quince celebraciones de una actividad para poder señalarla como fiesta de interés turístico regional. Lorente expresó: “Finalizando las Jornadas Medievales 2012, sólo quedarán catorce Jornadas para optar al reconocimiento de fiesta de interés turístico regional”.
Con ambos alcaldes medievales proclamados, los personajes medievales se dirigieron a la zona del parterre del Río para celebrar una comida popular al estilo medieval consistente en Callos con garbanzos, de las que se degustaron casi dos mil raciones. La Junta de Cofradías fue la encargada de elaborar un “zurra” y del reparto del mismo junto a la comida. Después del ágape, se procedió a la entrega de premios de indumentaria medieval y de los participantes ganadores de los Juegos Medievales. Los premios, de hasta ciento cincuenta euros, fueron entregados en monedas de euro, dentro de bolsas de cuero.
Sin lugar a dudas un fin de semana en el que el buen tiempo ha sido el mejor aliado de estas Primeras Jornadas Medievales celebradas durante todo el fin de semana en Manzanares.
