Decenas de ciudadanos convocados por la Plataforma por el Futuro de Puertollano mostraron este domingo su apoyo a José Antonio Giménez Giménez, el ciudadano que mantiene desde el 17 de junio una huelga de hambre para reivindicar un puesto de trabajo y protestar por el «rescate bancario» frente al «rescate ciudadano».
Durante el acto se leyó un comunicado que reproducimos íntegramente:
«Esta noche estamos aquí para solidarizarnos de nuevo con nuestro vecino, compañero y amigo José Antonio Jiménez, que cumple una semana desde que se declaró en huelga de hambre, el pasado domingo.
Algunos pensaréis que no es necesario llegar a estos niveles, que es uno más entre tantos, que supone llevar al extremo su drama personal y familiar. Pero ante todo debemos tener en cuenta su dignidad, su dignidad como trabajador, su dignidad como padre de familia, su dignidad como ser humano.
Muchos son los ciudadanos que se encuentran en su misma situación, pero pocos los que tienen semejante tenacidad a la hora de llevar a cabo su protesta. Por lo tanto, la pregunta no es si hace bien o hace mal nuestro vecino José en ponerse en huelga de hambre. La pregunta es: ¿Hasta cuando vamos a permitir semejante atropello ciudadano? ¿Cuántos deben llegar a situaciones extremas para que esto se arregle?
Porque esto nos lleva a preguntarnos la madre de todas las preguntas: ¿Alguien cree que esto tiene fin? ¿Vemos la salida al final del túnel? Si nos paramos a reflexionar, quizás entendamos las razones que han llevado a José Antonio a poner en marcha esta protesta, drástica pero justa. No olvidemos que él solo quiere lo mejor para su persona, su familia y su comunidad, como cualquiera de nosotros.
No es justo que nos encontremos con semejante drama nacional como es el paro, pero más injusto es que un trabajador con semejante experiencia profesional como José, una persona que ha trabajado en la construcción de empresas como Elcogas, líneas de AVE, y demás infraestructuras de importancia, sea despreciado por su edad, de poco más de 50 años.
Sin duda son muchos los trabajadores en esta situación. ¿Y qué respuestas reciben de las administraciones? Silencio absoluto. Algunos pensaréis que no se ha esforzado lo sufriente a la hora de buscar un empleo… ¿Les parece suficiente más de 1.500 curriculum? Admitamos todos que es prácticamente imposible que una persona con su edad encuentre trabajo.
Pero no es lo único esa situación de desesperación o abandono institucional, aunque seguramente sea lo peor. Porque suponiendo que consiga llegar a la jubilación y sobrevivir estos años con los ridículos 400 euros, al final de una vida de trabajo y esfuerzo la pensión que le queda es ridícula y no responde a los 35 años cotizados y bien sudados.
Por eso todos podemos ser José Antonio, y desde aquí debemos ver que este drama humano es un fallo de nuestra sociedad y de nuestros responsables políticos.
PORQUE SU LUCHA ES LA NUESTRA, Y SU FUERZA NUESTRA ESPERANZA, GRACIAS JOSÉ ANTONIO POR ENSEÑARNOS A LUCHAR».
