La senadora del Partido Popular por la provincia de Ciudad Real, Rosa Romero, ha defendido, en el Pleno del Senado, la proposición de ley que su grupo parlamentario ha presentado para establecer un marco regulatorio específico que proteja a los profesionales sanitarios de las agresiones que sufren en su ámbito laboral.
Romero ha comenzado su intervención mostrando su reconocimiento y respeto a los profesionales sanitarios que, durante la pandemia, de la que ahora se cumplen cinco años, se pusieron en la primera línea de batalla, poniendo en riesgo su vida y la de sus familias, y ha continuado asegurando que la violencia contra estos profesionales es un “grave problema” que se ha incrementado en los últimos tiempos, tal y como reconocen la Organización Internacional del Trabajo y la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo, y, por ello, debe ser objeto de atención de los poderes públicos.
En este sentido, la senadora popular se ha referido a los datos del Ministerio de Sanidad correspondientes al año 2024, en los que se han notificado 16.558 agresiones frente a las 14.779 de 2023, unos datos que, según Rosa Romero, no reflejan toda la realidad “porque muchas de las agresiones siguen sin ser denunciadas”.
Entrando más al detalle, la dirigente del PP ha explicado que el 78% de las agresiones notificadas son a mujeres y un 22% a hombres, siendo la atención primaria y las urgencias hospitalarias donde se producen la mayoría de estos actos violentos.
“Estas agresiones físicas y no físicas, insultos, amenazas, coacciones, vejaciones, etc. tienen unos efectos muy negativos tanto para la persona afectada como para el sistema sanitario en su conjunto”, ha aseverado.
Señala Rosa Romero que pese a las medidas desarrolladas en los últimos años, entre las que destaca la modificación del Código Penal en 2015 para dar la consideración de “autoridad pública” a la figura del médico y personal sanitario en el ejercicio de su labor, o las normas y protocolos desarrollados por las comunidades autónomas, el problema ha seguido aumentando y, por ello, el Partido Popular ha presentado esta proposición de ley, “en línea con lo que demandan las organizaciones colegiales y los sindicatos”, para garantizar la seguridad y salud del personal sanitario tanto en el sector público como privado y dar visibilidad a este problema.
Asimismo, la senadora ciudadrealeña ha afirmado que el Partido Popular ha presentado esta proposición de ley en el Senado, “con las demandas de los profesionales sanitarios”, por la inacción del Gobierno, y ha recordado que esta iniciativa ya se debatió en el Congreso de los Diputados y que el PSOE y sus socios la rechazaron.
De igual forma, ha criticado al Gobierno de Sánchez por llevar seis ministros de Sanidad en siete años, “ya que han utilizado el ministerio como trampolín de ambiciones personales”, y ha censurado la actitud de la actual ministra de Sanidad, acusándola de no dar solución a los problemas y de crearlos donde no los había, “por su radicalidad ideológica”, manifestando que “en la sanidad se necesita menos ideología, más gestión y más consensos”.
Por eso, ha pedido a los senadores del resto de formaciones políticas que apoyen esta proposición de ley para que, durante su tramitación, pueda ser “enriquecida” con las aportaciones que consideren, pero les ha pedido que no la veten y la bloqueen como hacen con todas las leyes que presenta el PP, “retorciendo el reglamento del Congreso para servir a sus intereses partidistas o utilizando de forma torticera el veto del Gobierno, y para una ley que aprueban, la Ley ELA, sigue sin financiación casi cinco meses después”, ha lamentado.
Ha finalizado asegurando que “mientras el Gobierno es como el perro del hortelano, que ni come ni deja comer, en el PP estamos en la política que sirve y la que es útil para el ciudadano”.