La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ciudad Real considera «un despropósito» ver cómo toda el agua de las lluvias registradas y de los desembalses que se están produciendo se desaprovecha y se pierde pese a la gran necesidad de este recurso tan valioso para el desarrollo económico de la región.
Para la organización provincial agraria esta situación «deja patente la gravedad de la inacción de los responsables políticos, con el Ministerio para la Transición Ecológica a la cabeza, y de la inexistencia de una política hidrológica seria que vertebre y regule los flujos del agua de nuestro país, de tal manera que los territorios con mayores déficits hídricos puedan aprovechar esta agua en momentos de sequía».
Asaja advierte que estos episodios de lluvias y sequías se producen cada vez con mayor intensidad y frecuencia como consecuencia del cambio climático. Sin embargo, lamenta que no se esté haciendo nada para combatirlo, ha expresado en nota de prensa.
La organización provincial agraria urge a poner en marcha un Plan de aprovechamiento nacional para almacenar y canalizar el agua, para que cuando ésta llega de forma abrupta y excedentaria, lejos de convertirse en un problema, sea una oportunidad para los territorios que lo necesitan.
En este sentido, la organización lamenta «que no se hayan puesto en marcha medidas en los últimos 50 años, a pesar de las numerosas advertencias que viene lanzando Asaja» y en las que insiste dadas las oportunidades que pueden generar si se saben aprovechar estos fenómenos.
La organización agraria pide altura de miras para reconvertir estos sucesos, reconvirtiéndolos en una herramienta de inversión para el desarrollo agropecuario e industrial de las regiones.
Por último, para Asaja también se pone en evidencia estos días «el total abandono por parte de las Confederaciones Hidrográficas de algo tan básico como la limpieza de los cauces de los ríos y arroyos».
La excesiva acumulación de basura, vegetación y sedimentos obstruye el flujo del agua, aumentando el riesgo de inundaciones en épocas de lluvia. Limpiar los ríos ayuda a mantener un flujo adecuado y reduce la posibilidad de desbordamientos y, por tanto, de pérdidas de agua, ha defendido Asaja.