Un recorrido por la vida y la poética de José Ángel Valente que obtuvo el «Premio Príncipe de Asturias de las Letras, 1988»

Por José Belló Aliaga

José Ángel , poeta, narrador, ensayista, fue uno de los intelectuales españoles de mayor renombre durante la segunda mitad del siglo XX. Vivió en grandes ciudades, como Madrid, Paris, Oxford o Ginebra, pero acabó eligiendo Almería como lugar de residencia durante los últimos quince años de su vida. Sintió lo que el llamó “la irrenunciable llamada de la luz”.

Este espacio- el lugar del poeta- configura a partir de entonces una presencia en el legado de su obra que se manifiesta en la influencia de una ciudad del sur y de su luz en su poesía. Aquí encuentra Valente esta casa o, según sus propias palabras, la casa lo encuentra a él:  “No se sabe quién eligió a quién, si yo elegí la casa o la casa vino a verme”. Desde el primer momento participó activamente en la vida de la ciudad, implicándose en multitud de proyectos de carácter cultural, artístico y social, pero también amplió esta actividad a otras zonas de la geografía almeriense, como lo atestigua su defensa Cabo de Gata-Níjar- de cuyo Patronato fue integrante- o su colaboración con fotógrafos como Jeanne Chevalier o Manuel Falces.

Proyecto de rehabilitación

El proyecto de rehabilitación de su casa en Almería- llevado a cabo por el arquitecto Ramón de Torres- fue también el germen de una serie de textos como el titulado “Perspectivas de la ciudad celeste”, donde reflexiona sobre la dimensión simbólica del paisaje urbano de la ciudad y la arquitectura de esta casa; Valente no solo nos invita a compartir la experiencia del espacio arquitectónico, sino que, a través de ella, nos desvela el “crecer para la luz” de su propia experiencia poética. Valente concibe esta casa como un camino mágico que relaciona el sótano y la azotea, la ascensión de la cripta a la luz, que también impregna su propio proceso creativo.

La Casa del Poeta, a través de sus distintos espacios y zonas temáticas, trata de hacer un recorrido por la vida y la poética de José Ángel Valente, deteniéndose en aquellos aspectos más importantes que configuraron la una y la otra, en un intento por hacer accesible y realzar la importancia de su figura en el panorama de las letras españolas contemporáneas, así como de establecer la mutua influencia que ejerció Almería sobre Valente- y viceversa- y la relación del poeta con las demás artes. Una confluencia de la que fue siempre un intensísimo defensor.

Visita a La Casa del Poeta José Ángel Valente en Almería, calle José Ángel Valente, número 7

Premio «Premio Príncipe de Asturias de las Letras, 1988»

José Ángel Valente consiguió el «Premio Príncipe de Asturias de las Letras, 1988», que compartió con Carmen Martín Gaite.

Esta es el acta del Jurado:

Reunido en Oviedo, los días 11 y 12 de abril de 1988 el Jurado correspondiente al «Premio Príncipe de Asturias de las Letras, 1988» integrado por D. Carlos Luis Álvarez, D. Luis María Ansón, D. Manuel Arce, D. Leopoldo Calvo Sotelo, D. Rafael Conte Oroz, D. Miguel García Posada, Dª Soledad Puértolas, D. Gonzalo Torrente Ballester, D. Antonio Vilanova, presidido por D. Rafael Lapesa y actuando de secretario D. Emilio Alarcos Llorach, decide por unanimidad conceder este galardón a Dª Carmen Martín Gaite y a D. José Ángel Valente Docasar.

A la primera por su larga trayectoria y reconocidos méritos en el terreno de la narrativa española contemporánea, dentro de la cual su obra y su figura tienden un puente entre el realismo de mediados de siglo y el intimismo de la novela más actual, con especial atención a los problemas de la mujer española de todos los tiempos. 

Y al segundo, porque su poesía, en continua evolución desde el inicial latido existencial a la posterior indagación fenomenológica, es una interrogación profunda sobre el sentido del mundo, plasmada en un lenguaje denso y simbólico, de turbadora belleza, que lo ha convertido en uno de los más altos líricos españoles contemporáneos.

Oviedo, 12 de abril de 1988

Trayectoria de José Ángel Valente

José Ángel Valente (Orense, España, 1929 – Ginebra, Suiza, 2000), poeta, ensayista y profesor universitario, comenzó los estudios de Derecho en la Universidad de Santiago de Compostela, trasladándose posteriormente a la de Madrid, donde se licenció en Filología Románica en 1954 con premio extraordinario.

Viajó al extranjero en 1955 y durante varios años imparte clases de lengua y literatura españolas en la Universidad de Oxford, en la que obtuvo el grado de Master of Arts. A partir de 1958 residió en Ginebra, donde trabajó como profesor y como funcionario internacional de la ONU. Entre 1982 y 1985 vivió en París, donde dirigió el servicio español de traducción de la UNESCO. En 1986 se instaló en Almería. Siguió ligado a la docencia, dictando clases, como profesor visitante, en universidades como la de Irvine, en California (Estados Unidos).

Premio Adonais de Poesía, en 1954

Aunque sus primeros poemas se publicaron cuando aún era estudiante, Valente se dio a conocer en el mundo literario al conseguir el Premio Adonais de Poesía, en 1954, con su libro «A modo de esperanza». Perteneciente, por nacimiento y edición, a la generación llamada del 50 o del medio siglo, comenzó siendo un poeta testimonial e irónico, hasta que a partir de «El inocente», en 1970, su poesía adquiere un acento epigramático y conceptista. Las trasposiciones teóricas, el léxico culto y en ocasiones críptico, la ironía y el sarcasmo caracterizan su nueva etapa. No obstante, Valente nunca aceptó la limitación que suponía encuadrarse en una determinada corriente literaria representada por cierto número de escritores. En sus palabras, «hay que romper la noción de contemporaneidad. Llegado un momento, el escritor tiene que hacer una opción de soledad absoluta, no tiene contemporáneos». En todo caso se asocia a Valente con el grupo de poetas que supieron diferenciarse en su práctica literaria de la poesía realista de sus precursores sin prescindir del compromiso ético de aquéllos, acentuando además la batalla por un lenguaje específicamente literario.

Junto con las citadas, destacan entre sus obras las siguientes: Poemas a Lázaro (1960), con la que obtuvo el Premio de la Crítica, La memoria y los signos (1966), Siete representaciones (1967), Breve son (1968), Presentación y memorial para un monumento (1970), Interior con figuras (1976), Material memoria (1979), Tres lecciones de tinieblas (1980), con la que gana nuevamente el Premio de la Crítica, Sete cántigas de alén (1981), Punto cero (1980), Mandorla (1982), El fulgor (1985), En Dios del lugar (1989), No amanece el cantor (1992) y Nadie (1996).

Además de su obra poética, José Ángel Valente escribió textos narrativos y poéticos en prosa como Numero trece (1971) y El fin de la edad de plata (1973). También publicó ensayos literarios: Las palabras de la tribu (1971), Ensayo sobre Miguel de Molinos (1974) y La piedra y el centro (1983).

Fue sometido a Consejo de Guerra en 1972, al considerarse que en el cuento El uniforme del general, incluido en el libro Número trece, aparecían conceptos ofensivos para el ejército. Al tener por entonces su residencia en Ginebra, fue declarado en rebeldía.

Otros Premios

Colaboró en revistas como ÍndiceÍnsulaRevista de Occidente o Poesía, y en la prensa diaria, sobre todo en El País y en el suplemento Culturas de Diario 16.

En 1984 recibió el premio de la Fundación Pablo Iglesias, así como el Premio Nacional de Literatura en 1993 y el VII Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana en 1998. Su obra poética ha sido abundantemente traducida al francés, pero también a otras lenguas europeas, como el inglés, el francés, el italiano o el alemán.

José Belló Aliaga

Pies de foto

Foto 1:      José Ángel Valente recibiendo el «Premio Príncipe de Asturias de las Letras, 1988», de manos de, a la sazón, Príncipe Felipe

Foto 2:       A la derecha, nuestro colaborador José Belló Aliaga, junto al encargado de la Casa del Poeta, Luis Martínez García, con el Premio Príncipe de Asturias de las Letras, 1988

Foto 3:       Visita a la Casa del Poeta de Almería

Foto 4:       Acceso a la Casa del Poeta

Foto 5:       Sótano

Foto 6.       Sala de audición

Foto 7:       Fragmento de El Inocente, 1970

Foto 8:       Sótano (1)

Foto 9:       Sótano (2)

Foto 10:     Sótano (3)

Foto 11:     Sótano (4)

Foto 12:     Sótano (5)

Foto 13:     Sótano (6)

Foto 14:     Audiovisual       

Foto 15:     Recepción

Foto 16:     Sala de lectura

Foto 17:     Sala didáctica

Foto 18:     Lugar del poeta

Foto 19:     La vida del poeta

Foto 20:     La vida del poeta (1)

Foto 21:     Aspectos cotidianos de su vida y la influencia de Almería en su vida

Foto 22:     Valente y las artes

Foto 23:     Escalera de acceso a la planta alta

Foto 24:     Icónica creación colgante

Foto 25:     La casa del poeta como representación de la idea de su poesía y de su proceso creativo

Foto 26:     La relación de su obra con la arquitectura como expresión artística

Foto 27:     Todo proyecto de arquitectura puede ser concebido como una acción poética

Foto 28:     Vista de la planta alta

Foto 29:     Vista de la planta alta (2)

Foto 30:     Vista de la planta alta (3)

Foto 31:     La obra del poeta

Foto 32:     Un poema del poeta

Foto 33:     El halo del fuego

Foto 34:     Proyectos sobre el Cabo de Gata

Foto 35:     Primeras ediciones de sus obras, manuscritos, cartas, borradores y cronología poética

Foto 36:     La influencia de Almería en su obra

Foto 37:     “Serán ceniza”

Foto  38:    “La sombra del sueño”

Foto  39:    “La sombra del sueño” (1)

Foto  40:    El compromiso del poeta con la regeneración cultural de la ciudad de Almería

Foto 41:     El despacho del poeta

Foto 42:     El despacho del poeta (1)

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