Eduardo Muñoz Martínez.– Comenzaré explicándole, señor Cañizares, para que no se sienta agobiado por la totalidad del peso de estos párrafos, motivados por el mal hacer, que aunque personalizo en usted, porque los titulares, en periodismo, deben ser breves y concisos, la reprimenda va para usted, para el señor Chamorro y por supuesto, para sus huestes.
Les digo que la última fechoría, si es que no hay otra más reciente, es de órdago, – en sentido figurado -, porque con el tema de la reapertura del palacete de la Cruz Roja se han superado a ustedes mismos y, por si los lectores no han caído en la cuenta, les explicaré a qué me refiero, porque da la impresión de estar en una larga precampaña electoral, aunque con sus patrañas, siento tener que decírselo a ustedes una vez más, lo único que dan es pena.
Me sorprendió por varias razones e incoherencias a «ojos vista», la información que aparecía el pasado día 4 en la prensa escrita, supongo que supervisada por ustedes, cómo viene ocurriendo desde que ganaron los últimos comicios electorales municipales, en la que leemos: «Ciudad Real ha recuperado uno de sus edificios más emblemáticos. Se trata del antiguo palacete de la Cruz Roja, ubicado en la Ronda de Ciruela de la ciudad, que abrirá sus puertas del 6 al 8 de diciembre».
En otro punto de la información se indica que»el edificio estuvo al borde de la demolición en 2006, tras sufrir un incendio y un robo, pasó de ser considerado un inmueble sin valores arquitectónicos relevantes a convertirse en un símbolo de protección social «. En el último párrafo de la reseña se hace constar que fue entonces, en 2006, cuando la Junta de Comunidades escuchó las demandas vecinales y detuvo su demolición, aunque no sin daños, ya que la cubierta y otras partes clave del edificio ya habían comenzado a demolerse.
No sé si aposta, o sin querer queriendo, como decía el Chavo del Ocho, lo cierto y verdad es que hay varias «lagunas», olvidos…, qué no quiero pensar sean adrede, aunque tienen claros visos de ello, y que habrían de saber los ciudadrealeños y ciudadrealeñas.
Primero, cuando hablan de varios años de obras, omiten que esos trabajos han sido realizados gobernando PSOE, Unidas Podemos y Ciudadanos, aunque igual no les conviene que se sepa.
En segundo lugar, si estaba considerado un inmueble carente de valores arquitectónicos relevantes, por qué dicen ahora que es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad?
Tercero, se hace eco la crónica en que me baso, de que fue en 2006 cuando la Junta de Comunidades escuchó las demandas vecinales y detuvo su demolición, aunque con daños…, pero lo que tampoco dejan que diga la prensa es que la demolición, que también ayudaron a paralizar la formación política Unidad Castellana y ciudadanos de a pie, fue ordenada por el entonces alcalde Francisco Gil – Ortega Rincón, – que en paz descanse -, que casualmente también militaba en el Partido Popular.
Señor Cañizares, aunque por hoy ya tienen bastante, usted, el señor Chamorro y sus esbirros, que no es tiempo de verdades a medias mezcladas con mentiras enteras, máxime cuando afortunadamente cada vez son más los, y las, que saben del afán de ustedes por colgarse medallas que no les corresponden, tratando de disfrazar las realidades y de invisibilizar a quienes precisamente producen la sombra a la que ustedes viven, políticamente hablando.