Los bomberos del servicio de emergencia SESEMA del complejo industrial de Repsol en Puertollano viven intensas jornadas en Valencia mientras afrontan un torbellino de sensaciones que apenas puede contener su alto nivel de preparación. Los profesionales de emergencias de Repsol, todos voluntarios, asisten emocionados, conmovidos, agradecidos, temiéndose lo peor o aliviados, mientras evolucionan ayudando a los vecinos, achicando agua o detectando monóxido de carbono en los aparcamientos inundados de Bonaire, Picanya o Paiporta tras el paso de la DANA.
Los bomberos de SESEMA se turnan en grupos de seis efectivos desde el pasado 2 de noviembre. La madrugada del domingo llegó el primer equipo, que estuvo colaborando con la UME y otros bomberos procedentes de diversos puntos de España en el desagüe del ya famoso aparcamiento subterráneo del centro comercial «Bonaire» de Aldaia.
Uno de estos profesionales, Juan Ángel Sánchez, técnico de seguridad de SESEMA, relata a este digital que los efectivos puertollanenses han trasladado y manejado grandes bombas de achique del complejo petroquímico, con capacidad de desalojo de 1.000 metros cúbicos por hora, a la postre decisivas para que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad accedieran a este parking y comprobaran con alivio que no había víctimas.
Los bomberos de este parque de Puertollano, especializado en emergencias derivadas de incidentes industriales, siguen impactados por el escenario de devastación, relata Juan, aunque la pesadumbre que bascula sobre los voluntarios en la desolación es compensada por el cariño recibido. «Los vecinos están súper agradecidos de recibir la ayuda y eso te anima y motiva muchísimo», dice.
Las labores en el parking de Bonaire finalizaron el lunes por la mañana, y desde allí los efectivos de SESEMA, por el momento sin fecha de vuelta, se van desplazado a Picanya y Paiporta, siempre a requerimiento de la Unidad Valenciana de Emergencias y bajo la coordinación de Protección Civil, para acometer la evacuación de aparcamientos inundados con el apoyo de tres vehículos ligeros y diverso material logístico.
Tras finalizar su primer turno Juan Ángel Sánchez se queda con la gratitud de los vecinos, que han perdido muchas cosas, si no todo. «A pesar de ello no dudan en darte lo poco que tienen, incluso te hacen la comida y están siempre pendientes para que no te falte de nada», subraya, no sin ensalzar la profesionalidad, compañerismo y afán de servicio de todos los bomberos y técnicos de SESEMA que se turnan en el escenario de la tragedia.
LA RESPUESTA DE REPSOL A LA CATÁSTROFE
Desde el primer momento de la catástrofe Repsol se ha puesto a disposición de la coordinación de emergencias para aportar medios técnicos y humanos colaborando con el Centro Coordinador de Emergencias de España.
La actuación de la empresa también abarca otros frentes de solidaridad en Puertollano. Fuentes de la compañía recuerdan que colabora con el repostaje de los vehículos que están llevando material y alimentos a Valencia a través de la iniciativa puesta en marcha por el Ayuntamiento de Puertollano, la Asociación de Jubilados y Pensionistas AJYPE y la empresa Puertonarcea, entre otros comercios locales. Hasta la fecha, 10 furgonetas llenas han realizado dos viajes, repostando en la estación de servicio de «El Castillete» de Repsol en Puertollano.
En el ámbito regional, Repsol está en contacto con el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Letur (Albacete) para poner a disposición de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas sus medios técnicos y humanos. Así, ha suministrado propano a las cocinas instaladas en Letur para atender a los damnificados, y facilitado bombas de achique y grupos electrógenos al municipio. En Mira (Cuenca) la compañía también ha estado en contacto con las autoridades locales y ha repartido bombonas de butano y estufas a los vecinos afectados.
Excelente labor