El Centro de Mayores de Puertollano I vivió el martes pasado una jornada especial en la que jóvenes estudiantes de 4º de la ESO se convirtieron en protagonistas. Como parte de una iniciativa de voluntariado de Salesianos Puertollano, los alumnos presentaron un proyecto titulado “El pan, nexo de cultura y unión” que busca rendir homenaje a la rica historia y al poder cultural de un alimento básico en todas las sociedades: el pan.
El proyecto, desarrollado al principio del curso como parte de una Situación de Aprendizaje, ha permitido a los alumnos no solo descubrir la elaboración y la importancia simbólica del pan, sino también acercarse a la historia compartida y la transmisión de tradiciones culturales. Los jóvenes tuvieron la oportunidad de exponer ante los mayores la evolución del pan, su relevancia en diversas culturas y su papel en la unión de familias y comunidades.
La actividad incluyó una completa presentación que dio inicio con una introducción al proyecto y su sentido cultural. Los estudiantes mostraron a los mayores la historia del pan en el mundo y explicaron la elaboración artesanal de este alimento, que ellos mismos llevaron a cabo como parte de su aprendizaje. La parte más emotiva llegó cuando los alumnos presentaron los vídeos publicitarios que ellos mismos crearon, resaltando la conexión entre generaciones y el poder del pan como símbolo de unión.
Para sorpresa de los alumnos, la audiencia mayor les respondió con anécdotas y recuerdos sobre la elaboración tradicional del pan, enriqueciendo el diálogo y aportando vivencias que los jóvenes escucharon con interés. “Es bonito ver cómo algo tan simple como el pan nos conecta de una manera tan profunda”, comentó Sara González, estudiante de 4º de ESO.
Este proyecto no solo ha fomentado la colaboración entre generaciones, sino que ha permitido a los alumnos desarrollar habilidades de comunicación y respeto hacia otras edades. Tomás Conde, el profesor encargado de la materia, destacó la importancia de este tipo de iniciativas de voluntariado: “Este tipo de actividades permiten a nuestros jóvenes descubrir el valor del trabajo en equipo y de la empatía, y, además, promueven una conexión con la comunidad que va mucho más allá de las aulas.”
El Centro de Mayores de Puertollano I agradeció el entusiasmo y la implicación de los estudiantes, quienes concluyeron la presentación compartiendo una reflexión sobre el pan como símbolo cultural y de unión a lo largo de los siglos. Iniciativas como esta consolidan el papel del centro educativo en la formación no solo académica, sino también social y ética de los jóvenes, quienes encuentran en el voluntariado una oportunidad para aprender de los mayores y compartir sus propios conocimientos y experiencias