Manuel Artiñano Moraga, exconcejal, y miembro de la anterior ejecutiva local del PSOE en Ciudad Real.- El dardo lanzado por Pedro Sánchez contra el presidente de Castilla La Mancha, revela el interés, por iniciar un cambio en la secretaria general del partido del gobierno autonómico.
La llegada masiva irregular de inmigrantes a Canarias y otros territorios, está provocando un hacinamiento inhumano, que obliga al gobierno de España a invitar al resto de Comunidades Autónomas a la generosidad, mediante la disponibilidad de establecimientos que acojan a esta ingente desproporción de inmigrantes, en el resto de regiones.
El fundamento de esta decisión de Pedro Sánchez entiendo que es acertada, sin entrar en el problema de la “inmigración irregular”; pero no el procedimiento ni la decisión tomada acabo, la de ubicar la zona de acogida de estos inmigrantes en la infraestructura aeroportuaria del aeropuerto de Ciudad Real. Decisión del Sr. Sánchez, que cuasi evidencia un porte enviado envenenado con una historia pasada, ya sufrida y pagada con la entrada del gobierno de Cospedal en Castilla La Mancha.
Esta puya indirecta no tiene otro interés, que el de manchar la excelente imagen de un gobernante valiente, que se rebela ante la tiranía del secretario general nacional, que con su hacer, está desvirtuando la esencia de una ideología, con el único fin, de mantener el bastón de mando del gobierno, residir en la Moncloa, disfrutar de las dádivas que ofrece el cargo etc. parapetándose en evitar el acceso de la derecha en la gobernanza del país.
Espero que esta prepotente y mala intencionada decisión de Pedro Sánchez, no sea la única alternativa para trasladar a inmigrantes en un espacio calificado de uso principalmente para transporte de mercancías, y vuelos regulares, teniendo en el caso de Ciudad Real por ejemplo, colegio públicos, edificios y una residencia universitaria sin uso.