Quantum Minería responde a las críticas defendiendo la compatibilidad de su proyecto en Ciudad Real con la agricultura

La empresa Quantum Minería ha respondido este jueves al comunicado emitido por cooperativas agro alimentarias del Campo de Montiel, asegurando que su proyecto de investigación y explotación minera de monacita gris en la zona «no supone ningún daño para el medio ambiente, y es perfectamente compatible con el tejido económico y empresarial de la zona».

La compañía minera ha defendido que la actividad minera e industrial en torno a la monacita gris sería un elemento importante en la diversificación y fortalecimiento económico de la provincia. En este sentido, han argumentado que «Ciudad Real sumaría nuevas fuentes de riqueza y empleo, ya que esta actividad minera sería totalmente compatible con las actividades económicas agrícolas y ganaderas», según ha trasladado la propia compañía mediante nota de prensa.

La compañía ha reiterado que la explotación de la monacita gris de Campo de Montiel «supondría la actuación en unas 500 hectáreas, es decir, el 0,025% de la superficie de la provincia de Ciudad Real».

Además, ha señalado que su propuesta consiste en la realización de una investigación «que iría seguida de un proyecto de explotación minera, que, como no podría ser de otra forma, no sólo cumpliría escrupulosamente con todos los procedimientos de la legislación medioambiental -muy garantista- de España y la Unión Europea, sino que además adoptaría las mejores prácticas en cuanto a la salvaguarda de la biodiversidad y de la colaboración con los colectivos y poblaciones locales».

Por otra parte, la compañía ha asegurado que no pretende convertir Ciudad Real «en una suerte de vertedero de residuos contaminantes», en respuesta a las afirmaciones del comunicado emitido por Cooperativas Agro Alimentarias. «La planta de procesado y refino técnicamente sólo podrá tratar monacita gris, y no otros minerales», han precisado desde Quantum, planteando que «Ciudad Real tiene una amplia experiencia industrial y minera –por ejemplo, con la reciente mina de wolframio de Abenójar-, y Castilla-La Mancha dispone de normativa y controles que hacen imposible las malas prácticas».

«Lamentamos también que desde organizaciones empresariales se tache la labor de otras sociedades como ‘especulativa'», ha concluido la empresa, defendiendo que su proyecto en torno a la monacita gris se remonta a 2013 y mantiene su confianza en que el proyecto de investigación que presentó ante la Junta de Castilla-La Mancha en 2022 sea finalmente aprobado. «La hoja de ruta de la compañía es a largo plazo, en concordancia con las dinámicas y horizontes temporales propios de la actividad minera», ha afirmado.

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