El Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto en valor la “imprescindible” labor de coordinación del Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de la región, adscrito a la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital; un trabajo “fundamental” en la actuación de los distintos cuerpos de intervención frente a todo tipo de emergencias, especialmente en los casos de siniestros relacionados con el tráfico o con la movilidad, con la finalidad de proteger a la ciudadanía.
Así lo ha destacado el director general de Protección Ciudadana, Emilio Puig, durante la entrega de los Premios Clotoide 2024 en los que la Fundación de la Asociación Española de la Carretera ha reconocido al Servicio del 1-1-2 en el apartado de ‘Premio a la institución destacada’.
En el acto, que se ha celebrado en el Palacio de Congresos ‘El Greco’, ha estado presente el presidente de la Fundación, Juan Francisco Lazcano; el director general de Carreteras de la Junta, David Merino; entre otras autoridades y representantes. Se trata de la segunda edición de unos premios que se han entregado durante la ceremonia de clausura del ‘I Transforming Road Mobility’.
El director general ha aprovechado para felicitar al resto de personas y entidades premiadas reiterando que el Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha es un servicio del Ejecutivo autonómico de acceso gratuito e ininterrumpido para la ciudadanía. Su misión, ha explicado, consiste en proporcionar una “ayuda eficaz y coordinada” a través del Teléfono Único de urgencias europeo 1-1-2 ante situaciones de emergencia que pongan en peligro la vida de las personas, el medio ambiente, bienes y derechos o patrimonio, así como servir de centro de comunicaciones y coordinación de las actuaciones en situaciones de emergencia extraordinaria.
Desde que se puso en marcha hace más de dos décadas, en este servicio se han recibido más de 40 millones de llamadas y se han atendido más de 12 millones de incidentes, que en su mayoría están relacionados con los ámbitos sanitarios y de seguridad ciudadana.
El año pasado, concretamente, se recibieron más de 1,5 millones de llamadas (más de 4.000 al día), de las cuales 701.000 fueron llamadas procedentes. Del mismo modo, desde este servicio se movilizaron y coordinaron los medios necesarios, como Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, sanitarios, bomberos, mantenimiento de Carreteras, Protección Civil y Cruz Roja, entre otros, para la resolución de 248 accidentes graves.
Puig ha puesto de manifiesto que la atención a la ciudadanía durante 24 horas del día los 365 días del año requiere de “gran responsabilidad y un alto grado de profesionalidad, entrega, compromiso y vocación de servicio público”; por eso, ha remarcado que los más de 200 trabajadores del servicio están volcados en ofrecer una “respuesta integral, rápida y eficaz” ante este tipo de situaciones.
El director general ha dicho que el reconocimiento es para todos los componentes del 1-1-2 y los distintos grupos de intervención que trabajan en situaciones de urgencia y emergencia, al tiempo que ha abogado por seguir renovando y modernizando el servicio; como es el caso del nuevo edificio, cuyas obras ya han salido a licitación por más de 18 millones de euros, cofinanciado con Fondos FEDER, que va a multiplicar por cuatro la superficie actual y que va a dar lugar a unas instalaciones más amplias, modernas, funcionales y eficientes desde el punto de vista energético.