El salón de actos de la residencia universitaria Santo Tomás de Villanueva acogió el homenaje a los médicos jubilados del Colegio de Médicos de Ciudad Real. En esta ocasión, fueron 23 compañeros los que recibieron su reconocimiento. El acto estuvo amenizado por la Agrupación Coral Universitaria de Ciudad Real.
La presidenta del Colegio de Médicos, la Dra. Mª Concepción Villafánez García, comentó que hace varios días se dio la bienvenida a los nuevos residentes de la provincia, en las dos sedes colegiales. Junto con éste, son los dos actos más emotivos: se da la bienvenida a las nuevas generaciones y se os homenajea a vosotros que habéis dedicado vuestra vida entera al servicio de la medicina. Es un hola y un hasta pronto porque un médico nunca deja de serlo”. También recordó que “la experiencia acumulada no la debemos dejar perder, tenéis a Julio Gijón de vocal que está esperando vuestras inquietudes y propuestas”. Añadió que “las nuevas generaciones tienen mucho que aprender de todos vosotros, y no solo conocimientos científicos, sino a la empatía, a la paciencia, a mirar a los ojos de los pacientes, a la escucha activa, a coger de la mano a quien lo necesita, y a decir la palabra justa en el momento preciso. De todo esto podéis escribir una enciclopedia”.
El vocal de Médicos jubilados, el Dr. Julio Gijón, que en su experiencia, habló de todas las posibilidades que ofrece la nueva situación a la que se enfrentan los médicos jubilados. Asimismo, les instó a participar en la vida colegial, participando en las actividades que se organizan y proponiendo nuevas iniciativas que serán acogidas con todo cariño. En este sentido recordó el ciclo de conferencias organizado hace unos meses donde se debatían temas de interés sanitario en su vertiente histórica y su revisión actual, o el ciclo de cine. “Si se os ocurre algo que podamos hacer para juntarnos, id al Colegio y me buscáis”.
En representación de los compañeros fallecidos hablaron los Dres. Ramón Garrido Palomo, María Isabel Fiz Alcázar, y Andrés Pacheco.
El Dr. Garrido fue presidente del Colegio de Médicos de Ciudad Real, y presidente de la Comisión Deontológica. Explicó que “han pasado más de 40 años desde que decidimos dedicarnos a la Medicina. Mucho podríamos decir de lo que hemos hecho, pensado, sufrido… Somos muchos (los homenajeados hoy) porque pertenecemos a la generación del baby boom. Donde hemos ido pasando nos han ido poniendo barreras. Con nosotros impusieron la selectividad, éramos muchos y había que poner una barrera; en la carrera también éramos muchos con prácticas escasas y masificadas. Después aparece el MIR. Decenas de miles nos presentábamos con plazas escasísimas con el consiguiente paro”. Sin embargo, continuó “una vez que empezamos a ejercer es una de las mejores profesiones que existen, con un componente científico impresionante, pero con un componente humano que la hace diferente a otras ciencias. Es una profesión exigente, difícil, que nos hace no parar de estudiar nunca, y porque más allá de la exigencia legal tenemos una exigencia profesional, un código deontológico al que tenemos que responder”.
Por su parte, la Dra. Fiz, agradeció al Colegio que “desde el comienzo de mi colegiación me he sentido protegida. Quiero agradecerle a los que estaban antes, a los que han ido estando y a los que están la seguridad que me han dado en mi trabajo y también por todas las actividades promovidas”. Hizo mención especial a la presidenta por ser la primera mujer en ponerse al frente de la institución colegial. “Cada vez son más mujeres con cargos de responsabilidad, pero aún es solo un 20%. Sin embargo, en las facultades de medicina, más del 70% son mujeres, y eso es muy importante. Las mujeres tenemos una sensibilidad que nos ayuda en el desarrollo de nuestro trabajo. A los médicos que empiezan, concluyó, les pediría que sean técnicos, pero también que sean humanos, es fundamental la conjunción de ambas situaciones”.
Por último, el Dr. Pacheco, comentó que había tenido la fortuna de vivir en directo el nacimiento de la medicina de Urgencia en España, y “ha ocurrido en Ciudad Real, primer servicio de emergencia integral de emergencia en España en 1987. El Dr. Julian Ortega nos hizo intensivistas extrahospitalarios y nos lanzó”. Entre otras cosas, Ciudad Real también fue “pionera europea en trasfusión extra hospitalaria en helicóptero en lesionados con shock hemorrágico”. Concluyó su intervención agradeciendo el apoyo de su mujer durante todos estos años, y también de la presidenta con la que coincidió, laboralmente, durante muchos años.
Posteriormente, en la parroquia de San Pedro se celebró la misa en honor a los compañeros fallecidos. Los actos en honor a la Patrona finalizarán con una Cena de Hermandad a celebrar en los salones Namen, de Bolaños de Calatrava el próximo viernes.