El Gobierno de Castilla-La Mancha va a convocar mañana, a través de la publicación de la resolución correspondiente en el Diario Oficial de la región, las ayudas dirigidas a las unidades de apoyo en el mercado protegido de trabajo de Castilla-La Mancha, que contará con una cuantía de un millón de euros. Así lo ha anunciado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, en el marco del acto de bienvenida a los inspectores y subinspectores que se incorporan a la plantilla de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social en la región.
Las unidades de apoyo las componen las personas o equipos que, en el mercado protegido de trabajo de la región, ayudan a la plena inclusión laboral de las personas con discapacidad en los Centros Especiales de Empleo. “Nuestro compromiso por apoyar el empleo de los colectivos con mayores dificultades de inserción laboral, y en especial de las personas con discapacidad, sigue siendo muy alto, y mañana tendrá de nuevo reflejo en el Diario Oficial de la región, con la convocatoria de ayudas a las unidades de apoyo”, ha indicado Patricia Franco, que ha valorado que estas ayudas “crecen en un 66 por ciento con respecto a la convocatoria del año anterior, pasando de los 600.000 euros al millón de euros este año”, y ha recordado que las unidades de apoyo en los Centros Especiales de Empleo contribuyen de manera decisiva “a la plena inclusión laboral de más de 6.000 personas con discapacidad en Castilla-La Mancha desde nuestra llegada al Gobierno”.
La consejera ha avanzado la publicación de estas ayudas durante el acto de bienvenida a los nuevos inspectores, nueve, y subinspectores, otros nueve, que se han incorporado de manera reciente a la plantilla de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social en la región, donde ha estado acompañada por la directora general de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, Cristina Fernández.
En su intervención, Patricia Franco ha valorado que el refuerzo de la Inspección “nos va a permitir seguir contribuyendo a garantizar las condiciones de trabajo en el mercado laboral de Castilla-La Mancha”, gracias a un incremento de la plantilla que, en los dos últimos años, “ha supuesto la incorporación de 20 nuevos inspectores y subinspectores, pasando de los 103 con los que contaba la plantilla en el año 2021 a los 123 con los que cuenta en la actualidad”.
Ese refuerzo tiene traslado directo a la programación de la Inspección de Trabajo este año en la región, y lo tiene en todos los ámbitos, como ha dicho la consejera, “con más de 32.000 órdenes de servicio programadas para este año, un 30 por ciento más que en la programación inicial del año anterior, que fue de 24.927 órdenes, y creciendo en todos los aspectos: más de un seis por ciento más en prevención de riesgos laborales, un 30 por ciento del total y que pondrán el foco en campañas específicas en las actividades con altos índices de siniestralidad laboral, actividades musculoesqueléticas, riesgos psicosociales y la incorporación de nuevos fenómenos como el cambio climático”.
Además, la consejera también ha señalado el incremento del seis por ciento más en las labores dirigidas al control de las condiciones de trabajo en la región y con una de cada cuatro órdenes orientadas a la persecución y prevención de la economía irregular en la región, recordando que “gracias a los planes de choque específicos, casi 8.000 contratos en 2023 fueron transformados a indefinidos, 1.358 contratos vieron incrementada su jornada laboral, o casi 6.000 contratos fijos discontinuos fueron transformados en indefinidos”.
Por último, Patricia Franco ha subrayado la importancia de continuar reforzando el cuerpo de la Inspección para afrontar los retos y desafíos del mercado de trabajo a través de las funciones de vigilancia y control, asesoramiento e investigación, campañas y programas específicos, control de las infracciones y actividad sancionadora que realiza la Inspección.