Puertollano transfigura el horror en un Santo Voto de coraje y generosidad

Santos G. Monroy.– Puertollano ha convertido, un año más, el horror biológico de una pesadilla medieval en un acto simbólico de ensalzamiento de la entrega y la generosidad. El brillante acto de celebración del Santo Voto ha vuelto a proyectar los rostros del pueblo de Puertollano como en una tabla barroca, matizados por el fuego de las calderas como en las miniaturas del siglo XIV. Los representantes de los vecinos de Puertollano, encarnados en los agentes del Cuerpo de Policía Nacional nombrados como Embajadores del Santo Voto, han arrimado el fuego a las ollas conjurando al pueblo contra el mal, como símbolo de la unión vecinal ante la desolación.

El acto, conducido por el periodista de Onda Cero Javier Ruiz y acompañado de un emotivo, terrible y descarnado vídeo encargado por la Cofradía de Señoras de la Virgen de Gracia para narrar el drama histórico de la peste negra que en 1348 asoló a la ciudad, ha estado protagonizado por el Cuerpo de Policía Nacional, que ha desplegado para la ocasión parte de la Unidades de Caballería y de Guías Caninos.

El comisario Julián Maroto, en representación de la institución, ha sido investido por el alcalde Migue Ángel Ruiz de la capa de Caballero del Santo Voto, tras lo cual ha destacado «las virtudes y forma de ser y vivir de los puertollaneros, y el sacrificio de los policías afrontado una vida servidores públicos».

De su lado, la policía nacional Gracia María Silva Herrera, natural y vecina de Puertollano, ha pronunciado un soberbio discurso en el que ha ensalzado los valores de los puertollaneros y las potencialidades de la ciudad, al tiempo que ha recorrido la historia de la promesa de la ciudad a la Virgen de Gracia. En este contexto ha destacado el papel de la Policía Nacional «en su firme compromiso de servicio, dignidad, compromiso, entrega y lealtad», con la firmeza que dan sus 200 años de existencia en defensa de los derechos y libertades constitucionales de los ciudadanos.

De su lado, el alcalde Miguel Ángel Ruiz ha subrayado que el Santo Voto «es una promesa ancestral, es un compromiso sagrado que nuestros antepasados hicieron con devoción y fe». «El Santo Voto de Puertollano es más que una tradición, es un símbolo de unidad, de solidaridad y de respeto por nuestras raíces; es la promesa renovada de quienes decidieron hacer frente al desastre de una peste uniendo sus voluntades», ha recalcado.

El acto, al que han asistido los miembros de las corporación municipal y autoridades como los delegados provinciales de Desarrollo Sostenible, Casto Sánchez, y Sanidad, Francisco José García, así como el vicepresidente de la Diputación Provincial, Adrián Fernández, ha culminado con las actuaciones de las agrupaciones folclóricas Virgen de Gracia y Fuente Agria y el encendido de calderas.

Y allí, en la glorieta de la Virgen de Gracia, alumbrados por el fuego ancestral del Voto de Puertollano, los agentes y autoridades han prendido las calderas con el estofado de carne que será repartido este jueves.

Discurso íntegro de policía nacional Gracia María Silva Herrera:

“No se había conocido nada semejante. Los vivos apenas eran suficientes para enterrar a los muertos” testimonia la Vitae Paparum Avinonensium. Casi la mitad de la población de Europa sucumbió a los estragos de sus escalofríos, dolores generalizados, debilidad, náuseas y vómitos. Fue tal su rápida expansión que causó una gran debacle demográfico, colapso de la economía y afectó a la incipiente industria y comercio.

Era la llamada Peste Negra y fue en la mitad del Siglo XIV donde esa muerte negra marco un antes y un después en la sociedad española.

Puertollano, un minúsculo punto de población, fue asolado y diezmado, pero fueron sus gentes las que, desde la angustia, el miedo, la desesperación y las fuerzas por seguir como colectivo social, quienes hicieron surgir el espíritu más humano y atávico que
poseen las personas: La Solidaridad.

Fueron trece familias, con la fuerza que guía el mensaje de sus antepasados, las que iniciaron el camino de vivir y progresar en sociedad, las que realizaron un esfuerzo de intenciones especiales y de un gran significado que trascienden hasta nuestros días y a todos los que habitan esta Ciudad.

Y así, en el año 1348, concretamente en la Octava de la Acensión, el pueblo de Puertollano adquiere el más grande de los compromisos humanos: La Solidaridad para con los más débiles.

El número 13 simbolizado en las espirituales buenas intenciones que nos guían como Ángeles Custodios, se reflejó sobre las 13 familias puertollanenses que adquirieron el compromiso Sagrado del Santo Voto y lo transformaron en la fuerza vital que marca el
carácter de las gentes que habitan este pueblo: Puerto Plano. Hoy orgullosos todos sus ciudadanos y ciudadanas de tener una ciudad de Corazón de Hierro y grandes sueños.

Enclavada en La Mancha infinita, Tierra de Calatravos, Camino de trashumancia, lugar de
leyendas y naturaleza, donde su puerta flanqueada por el cerro de Santa Ana y de San Sebastián crean una variabilidad etnográfica cultural, Puertollano hace soñar nuevas oportunidades de mejor futuro.

El Santo Voto es una devoción, un rito, una tradición ancestral, la más antigua de España, que engrandece a sus gentes. Que revive cada año un hecho que invoca la solidaridad, sin recompensa, y el gesto, sin buscar el agradecimiento; ilustrando un camino de principios y valores sólidos e infranqueables que son el referente inexorable del bienestar y progreso social. El Santo Voto evoca aquel juramento de las 13 familias puertollaneras, que hoy es el valor y la virtud solidaria de sus gentes, cuya máxima expresión radica en el nombramiento del Embajador de la Orden del Santo Voto de Puertollano.

La Policía Nacional, integrada en esta Localidad desde hace casi cien años, queremos expresar nuestro agradecimiento al Excelentísimo Ayuntamiento de Puertollano y a Toda la
ciudadanía, por el enorme honor que supone ser nombrados Embajadores del Santo Voto.
Es un orgullo y gran responsabilidad portar tan máxima e importantísima distinción propia de quien encarna los compromisos y valores nacidos de aquella proclamación sine die del Santo Voto.

La Policía Nacional con su firme compromiso de Servicio, Dignidad, Entrega y Lealtad, tal como apuntala su lema y que todo Policía Nacional lee y aprende en sus primeros pasos en la Escuela Nacional de Policía, hoy renueva el Santo Voto de esta Ciudad con la firmeza que dan sus 200 años de existencia, que desde el 13 de enero de este año se viene celebrando bajo el lema: “Comprometidos Contigo”.

La Policía Nacional siempre velará por la convivencia ordenada a través de la seguridad, el
bienestar y progreso como mandato Constitucional y llevará a cabo sus principios y valores forjados a lo largo de siglos de constante y eficaz Servicio al ciudadano, como son: Sometimiento a la ley, imparcialidad e independencia, responsabilidad, atención al ciudadano, integridad, respeto, solidaridad, igualdad, no discriminación, liderazgo, disciplina, corrección e imagen, dedicación y compromiso hasta sus últimas consecuencias.

Dar la vida en un Servidor Público no es un acto heroico, es un compromiso que culminan los valores y principios mencionados.

Es en este momento y, desde el más profundo sentimiento de admiración y respeto que nos lleva la mirada al cielo infinito, donde se conforma esa aura de Ángeles Protectores que dieron la vida como Servidores Públicos.

Sus sacrificios honramos, hoy nosotros, Policías Nacionales, y los convertimos en cimientos de fuerza, energía, inspiración, pasión y motivación como poderoso mensaje para cumplir con nuestros compromisos y las obligaciones que nos demanda la sociedad.

La Real Cédula del Rey Fernando VII por el que hace 200 años crea la Policía Española, en aquel tiempo llamada Policía General del Reino, dice que el objeto de este novedoso Cuerpo de Seguridad Estatal es “la necesidad del reposo, que es el primer beneficio de las civilizaciones y la primera garantía del bien y la felicidad pública”.

Añade un elemento de seguridad jurídica importante: Por primera vez la Policía está obligada a la puesta a disposición judicial para ser juzgado el reo. También por primera vez se introduce el concepto de Policía Preventiva: “Garantizar la tranquilidad en las calles y caminos, patrullando enparejas y dando protección a los correos y diligencias”.

La Policía Nacional lleva 200 años al Servicio de España y su ciudadanía, con un bagaje Institucional permanente e ininterrumpido, adaptándose a la sociedad a la que Sirve, porque es la sociedad la que modela a su Policía.

Sin miedo al cambio, ya sea en sus formas de uniformes, colores o nombres, siempre ha ido forjado con tesón de hierro para ser lo que hoy es la Policía Nacional: Una Policía cercana y de un fuerte carácter de Servidores Público, donde su lealtad e integridad van de la mano para afrontar los retos de la sociedad, los tradicionales delitos y aquellos más
novedosos como los tecnológicos.

Puerto Plano, hoy Puertollano, es un lugar que facilita el paso y las comunicaciones, esa fue su historia y esa es su topografía. ¡Verdad que une a los puertollaneros!

Al norte: el barrio de la Fraternidad
Al este: el barrio del Carmen y el barrio de las Mercedes
Al sur: el barrio de Cañamares, el barrio de la Libertad y el barrio Centro Sur.
Al oeste: el barrio de Santa Ana, el barrio del Poblado y el barrio de la Constitución
Y en su centro: la Parroquia de Nuestra Señora Virgen de Gracia

Por su parte, El Paseo de San Gregorio es la columna vertebral de esta magnífica ciudad
sustentada por la Fuente Agria, la Casa de Baños y la Fuente de los Leones, extendiéndose su majestuosidad hasta el Terri, la Central, los Pinos, la chimenea Cuadrá, y llegando hasta el Minero, gigante de hierro.

No olvidar: La Extranjera, Pozo San Francisco, Pozo Norte, Pozo Elorza, Castillete de Santa María,… y un elenco de patrimonio histórico cultural e industrial de nuestro pasado, todo ello uniendo a los habitantes y transeúntes de esta impresionante ciudad.

Puertollano y su patrimonio histórico-cultural generan sorpresa, empatía y emoción al visitante, es fuente de tradiciones y costumbres para los lugareños reforzando su identidad, genera cohesión social y de pertenencia y, sobre todo, guía el futuro.

La riqueza cultural material, industrial e inmaterial de esta Ciudad, abre los caminos con lugareños que sueñan, luchan y creen en que ser mejor es posible, progresar es realizable, crecer es hacerse importante y generoso.

Puertollano es un referente nacional industrial, donde su índice de industrialización está a la cabeza de España y cuya apuesta por las energías renovables es ejemplarizante.

El sueño de un mejor futuro es posible y en esa lucha, en ese conjunto de actividades de
superación, de mantener tradiciones y de convivir en espacio seguros es donde siempre estará y participará la Policía Nacional.

Porque somos una policía de futuro, integrada por una diversidad de personas que prestan servicio uniformado o de paisano, con un denominador común que es la sólida base formativa, la alta capacitación técnica y la acreditada profesionalidad.

El objetivo de la Policía Nacional es crear entornos seguros, garantizar la convivencia y generar valor público. Para todo ello es importante explotar el potencial que atesoran sus integrantes mediante la adecuada gestión del talento beneficiándose la propia institución y sobre todo sus destinatarios, que son las personas.

El eje prioritario de la Policía Nacional es avanzar en la igualdad de género, en la protección de los derechos humanos y grupos vulnerables, realizar actuaciones en materias como los delitos de odio, los relacionados con la trata y explotación de seres
humanos y la violencia de género, articulando los mecanismos necesarios de asistencia y protección a la víctima.

Todo ello sin descuidar la función policial de carácter humanitario que es un Servicio Policial de ayuda, asistencia y auxilio a las personas. Estando como base troncal la colaboración, cooperación con Organismos e Instituciones y con las personas un contacto directo, cercano y de confianza a través de la Participación Ciudadana Y siempre, como así es, la Policía Nacional: Seguirá siendo un Operador de Seguridad referente mundial.

No se puede terminar sin poner en valor y asumir este nombramiento de Embajadores de la Orden del Santo Voto de Puertollano a la Policía Nacional recordando aquellos que, por una u otra causa, no pueden estar aquí ante el momento histórico, ancestral y simbólico del encendido de las calderas; donde la fuerza de su fuego reaviva una promesa
hoy convertida en voluntad de hierro.

Para los hombres y mujeres que nos precedieron, y quienes hoy no pueden estar con nosotros, la mejor forma de mostrar nuestro cariño y compartir la emoción de este gran momento, es recordarlos y trasladar nuestra emoción con un fuerte aplauso.

Año 1348, Octava de la Ascensión, fue un momento histórico imborrable que marcó el carácter y la singularidad de este pueblo, en el que un conjunto de familias puertollanenses afrontaron con solidaridad la Peste Negra.

¿Siempre hemos creído que aquello era pasado?……. Con esta Fiesta se les ha rendido homenaje y hoy volvemos hacerlo, pero sabiendo cómo es ese dolor, cómo es esa lucha, cómo es perder seres queridos en la angustia más temible.

Por todos ellos, por su entrega y sacrificio, se procederá, después de este acto, a encender el Fuego Sagrado y Solidario, que desde sus llamas iluminarán y exhalarán un aura gloriosa para honrar tan duro sacrificio y confirmar con el fuego la solidaridad y la firme promesa de nuestros antepasado del año 1348.

Día de la Octava de la Ascensión y hoy ante la Nuestra Señora la Virgen de Gracia.
Puertollano a 15 de mayo del año 2024. Finalizo con esta reflexión: El individuo es valioso como ser humano y siempre deberá ser respetado. El individuo en sociedad se fortalece. Un colectivo social hará imparable sus propósitos y acciones.
¡Viva España!
¡Viva el Rey!
¡Viva la Policía Nacional!
¡Viva Puertollano!

Intervención del comisario Julián Maroto:

Buenas noches a todos. Ante uds me presento: Soy el Comisario Julián Maroto Rodríguez, Jefe de la Comisaría de Policía Nacional en Puertollano, nacido en un pueblo manchego, Villafranca de los Caballeros de la provincia de Toledo.

Antes de nada, dar las gracias al Excelentisimo Ayuntamiento de Puertollano y a toda su población por nombrar a la Policía Nacional Embajadores del Santo Voto.

Es una alta distinción y enorme responsabilidad que nos obliga, en estos momento, a corresponder con honor y con orgullo, pero sobre todo con el sentimiento que honre este acto del Santo Voto, nacido de las entrañas y la profundidad de generaciones de mujeres y hombres de Puertollano.

Hoy queremos poner en valor las virtudes y forma de ser y vivir de los puertollaneros, pero también estamos obligados a transfundir una vida elegida como Servidores Públicos: Ser Policía Nacional.

Unir ambos, ser puertollanense y ser Policía Nacional, para transmitir con fuerza y pasión los sentimientos y emociones, sólo lo hace quien lleva la sangre de aquel hecho histórico que hoy conmemoramos. Además, siendo y sitiendo una profesión, como es la de SER Policia Nacional, al servicio de España y sus vecinos de Puertollano. Ahora, paso la palabra a la Policía Nacional Gracia María Silva Herrera, natural y vecina de la Ciudad de Puertollano.

Intervención del alcalde Miguel Ángel Ruiz:

Estamos  ante la fiesta más genuina, más auténtica  y que mejor nos  identifica  como pueblo.  Es  la fiesta del Santo Voto.

Nuestra fiesta, de la que nos sentimos orgullosos,es reconocida así  por la Junta de comunidades como Bien de Interés Cultural Inmaterial. 

 Y siendo  tan  singular nuestra fiesta,  este año hemos querido ensalzarla como merece,  ¡como fiesta local!  (La fiesta del Santo Voto es la fiesta más puertollanera   más puertollanense, más nuestra)

   El Santo Voto es   una promesa ancestral, es un compromiso sagrado que nuestros antepasados hicieron con devoción y fe. El Santo Voto de Puertollano es más que una tradición, es un símbolo de unidad, de solidaridad y de respeto por nuestras raíces.   Es la promesa renovada de quienes decidieron hacer frente al desastre de una peste uniendo sus voluntades.

 Es la fiesta de quienes decidieron  ofrecer un voto a la Virgen mediante el sacrificio de una vaca , cuyo guiso se repartiría como promesa a cuanta gente necesitada  la reclamase.

 Por esta razón  nació el reconocimiento  de los embajadores de la Orden del  Santo Voto o los caballeros y damas de la Orden del  santo  voto.. Unos galardones  con los que premiar a las personas e instituciones que por su labor profesional o compromiso cívico, trabajo o dedicación hayan hecho o hagan grande el nombre de Puertollano .

 Este  año es a  la policía nacional,  coincidiendo con el doscientos aniversario de su fundación.

 Más de seis siglos tiene nuestra tradición y dos siglos tiene el cuerpo de la Policía nacional.  Aunque  lo venimos haciendo  habitualmente,  hoy, precisamente  en la víspera de la octavva de la ascensión del 2024  hemos querido  destacar   la labor de   una institución que ha sido fundamental en la protección y el bienestar de nuestra sociedad durante dos siglos. Desde su fundación, los hombres y mujeres que integran nuestras fuerzas policiales han dedicado sus vidas al servicio público, velando por nuestra seguridad, defendiendo nuestros derechos y garantizando el orden y la justicia en nuestras calles.   Ellos  y ellas…  caballeros y damas  del cuerpo de la policía nacional son  merecedores de ser nombrados  EMBAJADORES  DEL SANTO VOTO DE PUERTOLLANO.

 Por ello también  esta noche y mañana , otro símbolo de nuestra ciudad…  El monumento al Minero  se iluminará de azul,  en honor también del color azul de la Policía Nacional.    Y les anunciamos  también que mañana  a las 10:30 horas de la mañana  descubriremos un sencillo monumento en la rotonda que hay en la avenida 8 de marzo frente a la que será la futura Comisaría de policía de Puertollano. Están todos vds invitados . 

 Y  termino… Como Alcalde quiero expresar mi agradecimiento a todos vds que hoy nos acompañan por  mantener viva esta tradición,  a los trabajadores municipales y voluntarios por su trabajo. A las cofradías de la Virgen de Gracia, a las agrupaciones folclóricas y a todos cuantos contribuyen a hacer de Puertollano una ciudad   mejor. Gracias  a todos y cada uno de los miembros de los cuerpos de seguridad,  y en especial  -reitero- mi felicitación  y  gratitud a la Policía nacional.    Paisanos, paisanas…  renovemos nuestro compromiso con los valores  de lo que hace casi setecientos años  decidieron hacer quienes frente al desastre unieron sus voluntades;   y trabajemos   juntos por un futuro más brillante y seguro para todos.

 ¡Viva (por muchos siglos más ) el Santo Voto de Puertollano!