Paula Artime Artime.- Se jubilan Paco y Pepe, como se jubilaron Nicesio y Francisco antes y como se jubilarán José Luis y Ángel. Se jubila la generación de jardineros que empezó con nada y de la nada y que nos ha dejado el patrimonio verde que ahora todas y todos podemos disfrutar. Gracias a ellos, a los que se han ido, a los que se van ahora y a los que todavía están, disfrutamos de los más perecido a la naturaleza que existe en nuestra ciudad, la infraestructura verde urbana.
Los jardineros nos reconocemos entre nosotros, da igual la procedencia, el sexo, la edad o la formación. Puede parecer que a los jardineros nos mueve únicamente la belleza y no es de extrañar, pues es fácil encontrarnos absortos en lo efímero de una flor, o en encontrarle el ritmo al rumor del agua que brinca en una fuente del parque, o ensimismados en el crepitar de las hojas secas bajo nuestros pies. Es por lo que podríamos parecer banales e incluso innecesarios, hasta que a finales del siglo XIX, con el concepto de Ciudad Jardín, los jardineros comenzamos a, además de dejarnos embelesar por la belleza, a asumir que somos indispensables para el bienestar comunitario. Y en esas seguimos, desde la belleza, enfrentándonos a un reto mayor: la adaptación de la ciudad al cambio climático con el único objetivo del bienestar común.
Paco lleva 17 mayos creando una Cruz para esta ciudad, cada año diferente y cada año con el mismo fin que se lleva haciendo siglos. Utiliza sus bienes más preciados: las plantas, su conocimiento, su experiencia y el amor por la belleza. Este es el último mayo, o no, o quizás sea el primero del resto de los mayos y cruces que vendrán y que nos seguirán sorprendiendo.
Pepe ha estado ligado a la infraestructura verde de Ciudad Real treinta años, eso significa que ha visto cómo se han creado todos los parques de esta ciudad a excepción del Parque Gasset y del Parque del Cementerio. Muchos de ellos los ha ideado, los ha visto finalizados y ha ido viendo cómo han madurado y, en todo ese tiempo, los ha conservado con la única finalidad de que la ciudadanía disfrute de todos sus beneficios, que son muchos y variados.
Entre jardineros nos reconocemos, nos valoramos y también nos agradecemos. Gracias compañeros por todo ese legado verde que nos habéis dejado.
Para Paco Pérez Selas y Pepe Arrieta León, de la Sección de Parques y Jardines del Excelentísimo Ayuntamiento de Ciudad Real.
Buen trabajo, Paco.